El Gobierno de Aragón comunicó ayer que indemnizará a los agricultores afectados por la crecida del río Ebro. Además, cifró en 25 millones de euros los daños provocados por la venida. El consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, Joaquín Olona, anunció que estas ayudas solo irán destinadas a las explotaciones agrícolas aseguradas y cubrirán el 100% de los daños. «Vamos a complementar al 100% las indemnizaciones que se tienen que producir a través del seguro agrario», señaló.

Olona informó de este paquete de ayudas tras la reunión que mantuvo con los representantes de los sindicatos agrarios UAGA, Asaja y Araga. Este plan de indemnizaciones se destinará a reparar las infraestructuras privadas y colectivas (comunidades de regantes), aunque Olona reconoció que se compromete «teniendo pendientes muchas cuestiones respecto al presupuesto». Así, confió en que «el Estado colabore porque tiene responsabilidad en materia de inundaciones».

En cuanto a los daños ocasionados por la riada, el consejero cifró en 19.000 las hectáreas inundadas y en 14.000 la superficie de cultivo afectada, en la que se incluyen los daños en cultivos, las pérdidas de cosechas y los perjuicios en infraestructuras.

En el ámbito de la ganadería, la DGA informó del traslado de 50.000 animales de 62 granjas (en otras cinco no se llegó a tiempo). Además, añadió que se produjeron 94 bajas de cabezas de ganado en la granja de Villafranca que no se evacuó (la explotación contaba con 2.400 cerdos), 200 de ovejas en la riada del río Grío (con el fallecimiento también del pastor) y 600 de lechones debido a la riada del río Arba. En este sentido, voluntarios del santuario Gaia de animales, situado en Camprodón (Gerona), lograron salvar a una cerdita que fue rescatada de la crecida a su paso por la provincia de Zaragoza.

Respecto al «punto negro» de Villafranca, el secretario general de UAGA, José Manuel Penella, denunció «la irresponsabilidad inaceptable del dueño de los animales, que es la integradora». De hecho, tuvo que ser la DGA la que el miércoles realizara el traslado de los animales. Respecto a los cultivos, Penella declaró el año como «perdido», ya que a la espera de tasar las pérdidas, los campos de alfalfa, de cereal de invierno, hortalizas y maíz se consideran irrecuperables.

Una reivindicación la expusieron el secretario general de Asaja, Ángel Samper, y el presidente de Araga, Jorge Valero. «Por un falso ecologismo no se está realizando una limpieza del río», denunció Valero, que alertó de que los embalses están «al 80%», por lo que puede producirse otra riada. Samper avisó de que pra solucionar estos problemas se necesita «revertir el déficit presupuestario en el mundo rural».