El Departamento de Agricultura y Alimentación del Gobierno de Aragón confirmó ayer la existencia de un nuevo caso de Encefalopatía Espongiforme Bovina en la comunidad. Este nuevo caso de "vaca loca" ha sido detectado en un ejemplar vacuno de 5 años perteneciente a una explotación Sahún (Huesca) y que murió en dicha granja a principios de mes.

Tras la comunicación de la muerte del animal por parte del ganadero, los veterinarios oficiales procedieron a la toma de muestras del encéfalo del animal, que dieron resultado positivo al test rápido en el Laboratorio Autonómico y, desde ese momento, se inmovilizó a todo el ganado de la explotación. Sin embargo, las muestras fueron remitidas al Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (Madrid) y al Laboratorio Nacional de Referencia para la EET de Zaragoza, que ayer confirmaron el resultado inicial.

Según explicó la directora general de Alimentación del Gobierno aragonés, Eva Crespo, no existe ningún riesgo de que algún ejemplar infectado entre en la cadena alimentaria ya que "todos los animales mayores de 24 meses pasan el test que detecta esta enfermedad antes de ir al matadero". Además, Crespo señaló que se va a proceder al sacrificio de todos los ejemplares de la granja de Sahún que nacieron un año antes y otro después que el animal infectado. Después, se realizará una encuesta epidemiológica y se procederá a la desinfección de la granja.

La DGA recordó ayer que mantiene la aplicación del programa de vigilancia y control de las encefalopatías espongiformes transmisibles.