Los servicios jurídicos del Gobierno aragonés estudiarán la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) que ha condenado a esta Administración y a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) a realizar las obras de compensación pactadas con el municipio de Los Fayos por la construcción del embalse de El Val. El Ejecutivo, a la vista del informe de sus especialistas, decidirá si recurre o no este fallo judicial.

Así lo explicó ayer el vicepresidente aragonés, José Angel Biel, quien prefirió esperar hasta conocer el dictamen de los juristas sobre la sentencia para profundizar en esta polémica. El TSJA ha dado la razón a un grupo de afectados de Los Fayos que hace más de siete años recurrieron ante el incumplimiento de los convenios de compensación pactados con el municipio. En esos acuerdos se establecieron diversas actuaciones para paliar las afecciones por la construcción del embalse de El Val.

El tribunal obliga tanto a la DGA como a la CHE a cumplir esos convenios. La confederación ya se pronunció el jueves en el mismo sentido que lo hizo ayer Biel: el organismo de cuenca estudiará la sentencia judicial antes de decidir si plantea o no un recurso de casación (que es el que cabe contra el fallo del TSJA).

El problema con estos convenios es, además de los años transcurridos desde que se firmaron y de los sucesivos cambios de gobierno en ambas administraciones, la dificultad de encontrar un único departamento involucrado en este tema. Y es que las obras pactadas en los convenios podrían repartirse entre diversas áreas.

BLOQUEO Uno de los incumplimientos más destacados es la construcción de una nueva zona residencial en Los Fayos para quienes no quisieran vivir en el municipio (que no se trasladó por la presa). Este proyecto compete al departamento autonómico de Obras Públicas, desde donde ayer se reiteró que el plan parcial que debía realizar el ayuntamiento de la localidad no cumple las prescripciones legales. Se mantiene, así, la situación de atasco que ha impedido el desarrollo de las obras.

El Val se terminó de construir en 1997, pero todavía no está en funcionamiento.