El Gobierno de Aragón tiene un objetivo claro en su hoja de ruta para el aeropuerto de Zaragoza: trabajar en «seis destinos nuevos» que poder incorporar a corto o medio plazo. Una de ellas, como adelantó este diario, y cinco rutas más. Con esa premisa están sondeando el mercado y ayer se entrevistaron con cinco compañías distintas en Madrid, aprovechando la celebración de Fitur. De ellas «la mayoría no operan» en la terminal de Garrapinillos, pero podrían hacerlo pronto.

Es fundamental, aseguran, avanzar con sigilo en sus objetivos y prefieren no desvelar qué ciudades resultan interesantes para la capital aragonesa. Pero los países en los que están centrando sus mayores esfuerzos están muy definidos, por el potencial turístico o por un interés comercial o empresarial que contribuya a hacer viable su implantación. Sobre la mesa tiene un reto: alcanzar el millón de viajeros al año. Se trata de una barrera que marcaría un antes y un después para Zaragoza porque, explicaron a este diario, batiendo esa cifra los turoperadores y compañías de Europa empezarían a fijarse más en ella.

SOLO DOS MILLONES

El Gobierno aragonés afronta este reto en solitario. Este año, el departamento de Vertebración Territorial dispone de dos millones de euros para este cometido, incluyendo el gasto que destina al aeropuerto de Huesca. Pero esta cifra es un tercio de lo que llegó a dedicar hace más de cinco años, cuando todavía contaba con el apoyo económico del ayuntamiento. Pero hoy el consistorio descarta implicarse en este cometido ni destinar recursos económicos.

Mientras, la estrategia de la DGA ha cambiado, por dos aspectos fundamentales. Por un lado, el más importante, es la implicación directa que sí está teniendo Aena en la búsqueda de destinos. A diferencia de años anteriores, el gestor del aeropuerto está trabajando mano a mano con el Ejecutivo autonómico, contactando con compañías y turoperadores, y analizando los datos de que disponen sobre las preferencias del usuario. Por otro lado, el gasto se dedica más a la promoción de Zaragoza en destino.

El objetivo es convertirse en el «referente del valle del Ebro», arrebatando clientela a terminales de tamaño similar o que captan más usuarios en el norte de España-. Para ello apuestan por países como Italia, Alemania, Reino Unido y Francia, pero también se han sumado dos mercados que serían novedosos: buscan ciudades de Holanda y Marruecos.

El primero interesa porque se ha desvelado como uno de los destinos vacacionales que más interés puede despertar en un radio de actuación de 150 kilómetros donde se localizan más de 2,5 millones de habitantes. El segundo, por el importante número de inmigrantes de este país que residen en la comunidad autónoma. El abanico de ciudades es amplio en este país africano (Fez, Marrakech, Rabat...) y la conexión de la comunidad aragonesa con el Magreb tiene un potencial indudable. Y se produce en un momento en el que viajar a países árabes sale más barato que hace pocos años.