El Gobierno de Aragón asumirá a partir del próximo curso el pago del 50 por ciento de la matrícula de los alumnos aragoneses que estudian un grado en la Universidad de Zaragoza y que hayan superado el año anterior la mitad de los créditos en los que se hayan matriculado, siempre que estos sean, al menos, 42, y con independencia de la renta familiar.

La consejera de Innovación, Investigación y Universidad, Pilar Alegría, arropada por el presidente de Aragón, Javier Lambán, ha presentado hoy esta medida, pionera en España, ante los medios de comunicación.

Dentro de su apuesta por la educación pública superior y por crear una sociedad "igualitaria, pero también meritocrática", según Lambán, el Gobierno ha establecido esta medida que a partir del curso 2018-2019 podría beneficiar a 15.000 estudiantes, siempre que estos tengan vecindad administrativa aragonesa (es decir, que lleven al menos dos años empadronados en la comunidad) y que estudien en la Universidad de Zaragoza y sus centros adscritos (Escuelas de Enfermería de Huesca y Teruel, Escuela Universitaria Politécnica de La Almunia y Escuela de Turismo).

La medida generará, según la consejera, una "verdadera igualdad de oportunidades" y ayudará a las familias que "es esfuerzan" por la educación de sus hijos a lo largo del curso académico.

Con un presupuesto que podrían rondar entre cinco y seis millones de euros, se estima que 15.000 de los 27.000 alumnos de grado de la Universidad de Zaragoza podrían beneficiarse de la medida, ya que hay que descontar a los 5.000 de primer curso y a los 6.000 que disfrutan de una beca del Ministerio de Educación o de una de las llamadas Becas Rectos, que conceden la Universidad de Zaragoza y el Gobierno de Aragón.

Para obtener la bonificación, a partir del segundo año del grado, los estudiantes deben aprobar, en primera matrícula, el 50 por ciento de los créditos en los que se hayan matriculado el año anterior, independientemente de la nota.

Así, como es obligatorio que en primero el alumnado se matricule en 60 créditos de los 240 que componen la totalidad de un grado, para obtener la ayuda debería aprobar 30. En años consecutivos, el número de créditos en los que se debe matricular el alumno no puede bajar de 42 y, por lo tanto, tiene que aprobar 21 para obtener la ayuda.

Como ejemplo, Alegría ha explicado que un alumno que se matricule en primero en 60 créditos de Medicina, Arquitectura o Bellas Artes tendrá que pagar en torno a 1.400 euros, pero si aprueba 30, al año siguiente solo pagaría 700 euros por la matrícula.

Existen cuatro niveles de experimentación en los grados universitarios, cuyo precio, referido a esos sesenta grados, está entre los citados 1.400 y 880 euros, con lo que las bonificaciones oscilarán entre 700 y 440 euros.

La medida entrará en vigor independientemente de que el Parlamento consiga aprobar los presupuestos de 2019 porque "hay cabida" en unas cuentas prorrogadas, ha dicho Alegría.

El presidente, por su parte, ha enfatizado que se pretende estimular "la actitud, el compromiso personal, el estudio, el talento y el esfuerzo" de los estudiantes, para lograr que las "limitaciones de la cuna" se eliminen gracias a políticas públicas como esta.

La consejera ha agregado que la "apuesta" por la educación superior de su Gobierno es "estratégica" desde el primer momento de la legislatura, y que esta se ha demostrado con el acuerdo para incrementar la financiación básica de la Universidad de Zaragoza desde los 143 millones de euros en 2015 a los 158 de este año, que serán 160 en 2020.

A ello se suman los 2,5 millones de euros anuales presupuestados para infraestructuras, el arreglo de la Facultad de Filosofía o las becas autonómicas, que han pasado de tener 225 beneficiarios y una cuantía de 275.000 euros en 2015 a afectar a más de 2.000 alumnos con 3,2 millones de euros en 2018.