A falta de que las comisiones de garantías hagan sus propuestas para configurar las ratios del próximo curso, desde el Departamento de Educación del Ejecutivo aragonés prevén que la nueva zona 8 de Zaragoza mantenga unas cifras de alumnos por aula en educación Infantil similares a las que tuvo en años anteriores, de 25 estudiantes por clase. Esta nueva área, fruto de la división de la antigua zona 5 en dos, abarca los barrios de Romareda, Arcosur, Valdespartera y Rosales del Canal. La razón que alegan para que en estos distritos se mantengan estos números es que se trata de la zona con mayor presión demográfica. El director general de Planificación y Formación Profesional, Ricardo Almalé, acompañado por la directora provincial de Educación en Zaragoza, Isabel Arbués, ofreció ayer estos datos durante la presentación el proceso de escolarización para el curso 2018-2019, que tendrá lugar entre el 18 y el el 25 de abril.

Sobre la situación de la nueva zona 8, Almalé afirmó que «posiblemente» la ratio se mantenga «en números similares a cursos pasados». En ese sentido, señaló que «es la última excepción de esa ratio minorada de 22 alumnos en educación Infantil que hemos implantado en todo Aragón». No obstante, matizó que habrá más plazas escolares que niños nacidos en esa zona en el año 2015 y censados en el 2018. «Hay plena garantía de que la zona cumple y cubre todas las necesidades potenciales», recalcó.

Novedades

No sucederá lo mismo en la nueva zona 5, fruto de esta división y que abarca al centro, el distrito Universidad, Torrero, La Paz y Parque Venecia. En este caso, sí que esperan que el número de alumnos por clase descienda respecto al que había antes, aunque Parque Venecia tendrá una ratio propia por sus características demográficas.

También se presentaron ayer otros aspectos novedosos del proceso de escolarización. Una de ellas es que se primará la proximidad al domicilio frente al lugar de trabajo. Además, en el próximo curso podrán superarse los tres alumnos con necesidades especiales (acneaes) por aula, límite que marcaba hasta ahora la norma, excepto en centros con más de un 20% de estos alumnos. De esta forma, superar este límite a partir de ahora dependerá de las vacantes y características de cada centro.

También se mantendrá durante todo el curso la reserva de plazas en cada clase para alumnos con necesidades especiales y no podrán ser ocupadas por alumnos ordinarios. Igualmente, se modifica la escolarización fuera de plazo, de manera que los centros con un número de acneaes por encima de la media y con vacantes las ofertarán preferentemente a alumnos ordinarios. En el caso inverso, aquellos centros que estén por debajo de la media, dispondrán estas plazas preferentemente a alumnos con necesidades especiales.