El Gobierno de Aragón quiere remitir a las Cortes a finales de este año el anteproyecto de la ley de espectáculos y establecimientos públicos. La Dirección General de Interior de la comunidad está trabajando en la redacción de este borrador, que contempla la ampliación de los horarios de bares y locales hosteleros para adecuarlos a los nuevos hábitos de ocio de la sociedad aragonesa.

Según precisó el director general de Interior del Gobierno de Aragón, Javier Artajo, el texto abordará también la clasificación de los establecimientos hosteleros, las sanciones aplicables por incumplimiento de la ley, la concesión de licencias o la regulación de las zonas saturadas.

"Los horarios actuales se rigen por una ley antigua y trasnochada. Entendemos que los hábitos de la gente han cambiado, que ahora se sale más tarde y que muchos hosteleros, si cumplen el cierre, no cubren gastos", dijo Artajo.

No obstante, precisó que deberán analizarse cada una de las zonas de ocio y tenerse en cuenta las realidades de cada municipio. "Habrá que contemplar si todos los locales deben regirse por los mismos límites porque hay sectores más castigados que otras. Se ampliarán horarios en algunos bares, siempre que cumplan con la normativa en materia de licencias, seguridad, ruido e higiene", apuntó.

En su opinión, "no hace daño consumir en el interior de un bar si así se consigue sacar a la gente de la calle y evitar que se produzcan molestias".

UN PROBLEMA MENOR El director general de Interior explicó que la intención del Gobierno de Aragón es "consensuar" al máximo la nueva ley. "En Zaragoza se ha suscitado una polémica en torno a los bares que obliga a trabajar con mucho tacto, reuniendo a las partes para garantizar el respeto de los derechos al descanso, al ocio y al trabajo", indicó.

Al respecto, negó que los horarios sean la cuestión más espinosa a tratar en la nueva ley. "Se ha hablado mucho de esta cuestión pero es más importante evitar que muchos bares funcionen sin licencia municipal o lo hagan con una que no se ajusta a la clasificación con la que se encuentran registrados". Artajo añadió que actualmente tampoco existe "claridad" acerca de la saturación de las zonas en las ciudades e insistió en que es preciso distinguir entre unos establecimientos y otros, sobre todo, en materia de sanciones.

Durante los próximos meses, se pretende establecer contacto con los colectivos hosteleros, con asociaciones de vecinos y con el Ayuntamiento de Zaragoza. "Hace un año ya hubo reuniones para poder analizar la situación y seguirán sucediéndose con la intención de redactar un texto consensuado", dijo.