Tania, una joven zaragozana, es la protagonista de otra variedad de incidencia con la vivienda, en la que el problema no deriva del banco. Como recogió ayer la Cadena Ser, la mujer compró una VPO hace menos de una década, pero por problemas laborales no ha podido hacer frente a la hipoteca. Según explicó, por intercesión de Stop Desahucios logró que el banco vendiera la casa a un tercero por el valor que a ella le quedaba por pagar, con lo que logró algo similar a una dación en pago. Sin embargo, ahora el Gobierno de Aragón, que aceptó la venta, le reclama 18.000 euros en ayudas que ha estado recibiendo, en forma de rebajas, por tratarse de una VPO. Toca volver a negociar.