El Gobierno de Aragón tendrá una participación del 25% en los patronatos de las fundaciones surgidas de la transformación de las cajas de ahorro aragonesas, según el proyecto de ley aprobado hoy por el Consejo Extraordinario de Gobierno.

El consejero de Hacienda, Javier Campoy, ha explicado que la ley se ha aprobado con el objetivo de armonizar la legislación autonómica a la estatal, aprobada en diciembre de 2013 y que supone la desaparición de las cajas de ahorro.

Esta ley estatal básica obliga a la transformación de Ibercaja en una fundación bancaria, en tanto en cuanto la antigua Caja Inmaculada ya se transformó en una fundación de carácter especial.

Por eso es necesario modificar la ley aragonesa de enero de 1991, reguladora de las Cajas de Ahorros de Aragón.

El proyecto de ley aprobado hoy desarrolla las competencias de la Comunidad aragonesa en materia de cajas de ahorros y fundaciones, en tanto en cuanto éstas últimas se erigen en herederas de la obra social que las cajas venían realizando.

En el desarrollo de la norma estatal se regulan los órganos rectores únicamente de las fundaciones bancarias.

La ley aragonesa, en cumplimiento de lo que establece la estatal, reserva a los representantes de la Comunidad Autónoma el 25% de los puestos del patronato, que ocuparán personas "que posean conocimientos y experiencia específica en materia financiera".

Hasta ahora, ese porcentaje de participación de los representantes de la Comunidad era del 40%.

El resto de patronos serán representantes de las entidades fundadoras de las cajas de las que proceden o de entidades representativas de intereses colectivos; personas privadas, físicas o jurídicas que hayan aportado significativos recursos a la fundación; personas independientes de reconocido prestigio profesional en las materias relacionadas con el cumplimiento de los fines sociales, y personas que posean conocimientos y experiencia específicos en materia financiera.

Además, en la ley se impone a las fundaciones un "determinado nivel de transparencia e información" a los destinatarios de la obra social.

El consejero, en declaraciones a los medios de comunicación tras el consejo extraordinario ha explicado que con la nueva ley aragonesa "se afianza" que las entidades aragonesas, como hacían las obras sociales de las cajas, sigan teniendo una "importancia muy grande" en la Comunidad y haciendo una labor de vertebración social y territorial.