La mentira tiene las patas muy cortas. La Policía Local de Zaragoza detuvo ayer por la tarde a un joven de 21 años por un delito de desobediencia, después de que incumpliera por novena vez el real decreto de estado de alarma. Ocurrió en el barrio Oliver de la capital aragonesa.

Fue una patrulla la que le paró sobre las 20.00 horas que le identificó y le preguntó a dónde iba, siendo contestados que estaba de camino del supermercado y que iba a hacer la compra.

Los agentes no le pusieron reparos, pero a la media hora este misma persona, D. R., fue vista de nuevo por los policías. Le volvieron a dar el alto y comprobaron que no había adquirido nada. Cuando procedieron a su identificación, comprobaron que había sido denunciado hasta en ocho ocasiones por incumplimientos del estado de alarma. La primera un 20 de marzo.