Las tres ladronas de pisos que la semana pasada se ausentaron del juicio en la Audiencia Provincial de Zaragoza acudieron finalmente anteayer para cerrar un pacto con la Fiscalía, tras admitir los hechos y pagar el botín robado y los daños causados. Finalmente la pena fue la mitad de la que les pedían inicialmente, tres años de prisión, conmutados por diez de prohibición de entrada en España.

Así, las tres mujeres, con pasaporte francés pero de origen croata, admitieron, asistidas por el penalista José Luis Melguizo, entre otros letrados, que formaban una banda itinerante de ladronas de viviendas alojada en un piso de alquiler de la localidad navarra de Tudela.

Desde allí, Sabrina Milanovic, Julia Stankovic y Snezana Jovanovic vijaron, entre el 14 de diciembre del 2015 y el 4 de marzo del 2016, a viviendas ubicadas en Zaragoza, Huesca y Calahorra (en La Rioja), con un coche alquilado en Francia, para robar, o intentarlo, en las casas. Normalmente la primera vigilaba en el portal mientras las otras dos abrían las puertas, o lo intentaban, con herramientas como llaves inglesas y destornilladores que les fueron decomisadas en el vehículo, cuando las detuvieron en Zaragoza.

En algunos de los robos los propietarios las sorpendieron in fraganti, pero lograron huir hasta que, el 4 de marzo del año pasado, las arrestaron. El valor de los bienes robados y los daños en las viviendas suma 26.733 euros, ya satisfechos por las ladronas.