La Diócesis de Barbastro-Monzón ha obtenido el apoyo expreso del Vaticano en el litigio por la devolución de los bienes histórico-artísticos de las parroquias aragonesas depositados en Lleida, aunque el obispo de esta ciudad catalana, Joan Piris, debe dar pasos para posibilitar el proceso.

Así lo ha manifestado el obispo de la Diócesis altoaragonesa, Alfonso Milián, en una rueda de prensa convocada para informar de la visita Ad Limina llevada a cabo la semana pasada junto al resto de obispos aragoneses y de las gestiones llevadas a cabo en relación al litigio con el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin.

Milián ha asegurado que en su encuentro con Parolin, al que asistió en compañía del resto de prelados aragoneses, vio la disposición de éste a "trabajar por el bien de la Iglesia y a restituir a cada uno lo suyo".

El obispo de Barbastro ha explicado que el cardenal ya conocía el conflicto por los bienes de las parroquias aragonesas desde años atrás, pero su actual condición como el hombre más importante del Vaticano después del Papa "hace que sus palabras y su disposición sean más importantes ahora", ha añadido.

"Ver la disposición en la que lo encontré y la preocupación que tenía (por el litigio) nos llenó de esperanza, más que en las veces que había estado con él", ha añadido en relación a la actual responsabilidad del secretario de Estado.

Alfonso Milián ha destacado que percibió "interés" en Pietro Parolin en relación al conflicto que enfrenta a las diócesis de Barbastro y Lleida desde hace 16 años, pero ha añadido que no les informó de las acciones que podría emprender para tratar de solucionar el litigio.

En relación a este punto, el obispo ha asegurado desconocer si Parolin podría optar por dirigirse al Estado español en busca de una solución al conflicto, porque, según ha señalado, "hay otras vías" posibles.

Milián ha admitido que se encontró brevemente en Roma con el obispo de Lleida, aunque ha precisado que no llegaron a hablar del litigio ni si el prelado catalán lo hizo con Piris.

Ha agregado, sin embargo, que en las conversaciones que ha mantenido en diversas ocasiones con el obispo catalán, éste le había expresado su acuerdo con la reivindicación aragonesa pero también las "dificultades" e "inconvenientes" a los que tenía que hacer frente para llevar a cabo la devolución.

El responsable eclesiástico ha asegurado conocer, además, que el litigio es motivo de "sufrimiento" para Piris, quien, según ha afirmado, años atrás le manifestó textualmente: "Alfonso, yo esta tarde entregaba las obras de arte".

Ha argumentado, sin embargo, que la solución del conflicto "está en parte en manos" de Piris, y ha subrayado que en el proceso a desarrollar para cumplir con las sentencias que ordenan la devolución de los bienes "hay que tomar determinaciones que el obispo (de Lleida) tiene que ir cumpliendo".

El encuentro con Parolin se produjo un día después de la reunión que mantuvieron los obispos aragoneses con el Papa Francisco por motivos pastorales, y durante la cual Milián informó al pontífice de la situación del litigio.

Milián ha explicado que el Papa no sólo conocía el conflicto entre ambas diócesis sino que deseó que el encuentro posterior con Parolin discurriera bien y se pudiera encontrar una "solución".

Por otra parte, el obispo de Lleida ha expresado su confianza en la respuesta del Tribunal Supremo a los tres recursos interpuestos por el Gobierno catalán y la Diputación de Lleida contra la catalogación aragonesa de las piezas reclamadas.

A este respecto, ha señalado que las tres sentencias dadas a conocer ya por el Supremo en respuesta a los recursos interpuestos por el Consorcio de Amigos del Museo de Lérida hacen prever unas resoluciones favorables a la posición aragonesa.

Sin embargo, ha precisado que este tribunal sólo ha abordado la validez y legitimidad de la decisión del Gobierno aragonés de catalogar los bienes reclamados, ya que su propiedad ya fue resuelta por la jurisdicción religiosa.

Por esta razón, la Diócesis de Barbastro-Monzón no se planteado de nuevo la posibilidad de ceder la propiedad de estas piezas al Ejecutivo aragonés para que fuera la administración quien la reclamara a través de los tribunales civiles.

En cualquier caso, Milián ha asegurado desconocer el tiempo en el que se podría demorar la devolución de las piezas y si él vería su regreso a Barbastro en su actual responsabilidad como obispo de la ciudad.