El pleno de la Diputación de Huesca (DPH) aprobó ayer por unanimidad un moción en la que urge la devolución de los bienes artísticos de las parroquias oscenses que fueron segregadas de la Diócesis de Lérida. La diputación reclama el mantenimiento del litigio en el ámbito de los tribunales eclesiásticos.
El texto de la moción, que obtuvo el apoyo de todos los grupos políticos representados en la institución, valora positivamente la decisión de los tribunales vaticanos, que han reconocido la propiedad aragonesa de un centenar de piezas artísticas, la mayor parte de estilo románico, que están en la Diócesis de Lérida.
Asimismo, la DPH solicita la rápida reanudación de los trabajos de la comisión diocesana que debe analizar el origen de cada una de las piezas para proceder a su devolución.
La resolución manifiesta el deseo de la diputación de que "agotadas las vías previstas en el derecho canónico" se ponga fin al litigio mantenido entre las diócesis de Lérida y Barbastro-Monzón, y no se perpetúe en "estériles enfrentamientos políticos y sociales entre dos provincias cuyos ciudadanos son un ejemplo de diálogo y convivencia".
Con el contenido de la moción, la corporación altoaragonesa sale al paso de las manifestaciones hechas desde distintas instancias políticas e institucionales de Cataluña en relación al posible inicio de acciones civiles para impedir la devolución de los bienes a las parroquias oscenses.
Tras la sesión plenaria, el presidente de la institución, Antonio Cosculluela, manifestó su satisfacción por el carácter unánime del acuerdo suscrito por todos los grupos políticos, a quienes agradeció el "acto de responsabilidad" llevado a cabo.
"Queremos, una vez agotados todos los recursos interpuestos desde la Diócesis de Lérida, que la comisión eclesiástica creada empiece a trabajar a fin de que puedan volver las piezas, y deseamos también que el litigio se mantenga en el ámbito exclusivo de la iglesia", concluyó el presidente de la diputación oscense.
