Los trabajadores y la dirección de FCC Parques y Jardines pusieron ayer fin a 30 días de huelga indefinida en el servicio de mantenimiento de las zonas verdes de Zaragoza. Un broche definitivo cargado de contradicciones: pocas horas después de que en un fugaz encuentro por la mañana ambas partes rompieran la negociación; solo dos horas antes de que hiciera acto de presencia en la sala Multiusos de la capital el líder nacional del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y cuando el Gobierno municipal criticaba que este conflicto se estuviera politizando; y rubricado en el despacho de la responsable municipal de Servicios Públicos, Carmen Dueso, cuando hasta el alcalde de la ciudad, Juan Alberto Belloch, había asegurado en el pleno que nunca mediaría.

Al final, el Gobierno de la ciudad intervino y, aunque no se sabe si de este acuerdo habrá algún peaje económico para el consistorio en el futuro, la empresa y el comité firmaron la paz fijando la rebaja salarial en el 2014 en el 5%, un 16% menos de lo que viene aplicando a la plantilla desde febrero. Una reducción que, no obstante, la dirección de FCC se comprometió a restituir en los próximos tres años. Así, el salario se les incrementará el 1% en el 2015, y otro 2% en el 2016 y el 2017. Además, en esos tres años "se revalorizará el salario del año anterior con el IPC", afirmó la dirección en un comunicado.

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Además, se incorporarán a la plantilla actual ocho trabajadores que ahora eran eventuales, se mantiene el pacto social del anterior contrato --previo a la nueva contrata iniciada el pasado 1 de enero-- y, a cambio, los trabajadores retirarán todas las acciones judiciales que tiene en marcha. "El acuerdo ha sido posible al aceptar estas rebajas los trabajadores, al esfuerzo realizado por FCC y por las futuras ampliaciones, pendientes de definir, que durante los cuatro años de vigencia tendrá el contrato actual", explicó FCC. Esta es la parte en la que entraba en juego el consistorio y que nadie define.

Este acuerdo se convierte en una suma de pasos atrás por parte de todos los actores del conflicto originado tras la rebaja salarial del 21% aplicado en febrero --empresa, comité y ayuntamiento--, y que en el encierro de los empleados en las oficinas del Torreón Fortea alcanzó su momento de máxima tensión. Apenas faltaba media hora para que interviniera Rubalcaba en el mitin del PSOE en Zaragoza cuando se hizo público el acuerdo entre la dirección y los sindicatos, alcanzado en torno a las 19.00 horas, 30 minutos antes de arrancar el acto socialista. Así, se logró evitar una nueva protesta de los jardineros en su campaña electoral y que la foto hoy, último día de la misma, no fuera un vapuleo público similar al recibido por el conservador Cristóbal Montoro en Cataluña.