El Monasterio de Veruela está más cerca de convertirse en un Parador Nacional. La visita el miércoles del presidente de Paradores Nacionales, Antoni Costa i Costa, al recinto monacal y su intención de informar favorablemente a Turespaña, que tiene la decisión final sobre el nuevo parador, ha despertado el optimismo de las instituciones aragonesas.

El presidente del Gobierno Aragonés, Marcelino Iglesias, reconoció que había mantenido conversaciones con la dirección de Paradores Nacionales y con el ministro de Industria, José Montilla, y que había buenas perspectivas. "Es un espacio magnífico para que pudiera albergar un parador, sería uno de los mejores de la red y estamos trabajando para que esto sea así", afirmó

POSIBILIDADES Por su parte, desde la diputación provincial, propietaria del recinto monacal, se apuntó que se trata de un "gesto muy importante para recuperar el optimismo en las posibilidades que siempre hemos esgrimido". En la visita, el responsable de Paradores recorrió junto a Marcelino Iglesias, Javier Lambán y el delegado del Gobierno, Javier Fernández, las dependencias del impresionante enclave y se interesó por la realidad del entorno, las comunicaciones, la naturaleza y la actividad cultural de la comarca.

La visita del máximo representante de Paradores no ha sido la primera que desde esta entidad se ha realizado al Monasterio de Veruela en los últimos meses, y en las que han podido conocer las dos posibles edificaciones que acogerían el parador. Se trata del palacete abacial, una edificación del siglo XVI que se encuentra en la entrada del recinto, y el monasterio nuevo, un edificio del siglo XVII en que habría que realizar obras de restauración. Esta opción toma fuerza ya que se trata de un espacio de mayores dimensiones.

De esta manera, un viejo proyecto planteado por primera vez en la década de los 90, parece materializarse. La iniciativa ha pasado por distintas etapas, aunque hasta ahora, la respuesta del organismo estatal sobre el parador en Veruela no se había emitido pese a las numerosas reclamaciones realizadas por la institución provincial.

Ante el silencio del Ministerio de Economía, todos los grupos políticos (PSOE, PP, CHA a PAR) aprobaron en 2001 una moción en la que planteaban un ultimátum al Gobierno central: de no responder antes del 31 de diciembre de aquel año, la diputación iniciaría gestiones encaminadas a lograr la confluencia de la iniciativa privada y pública para establecer en Veruela una instalación hotelera de calidad.

En mayo del 2003, Lambán presentó el interés de la empresa aragonesa por desarrollar en el recinto un hotel de lujo. Pero esta iniciativa fue rechazada un mes después por el Ministerio de Hacienda.