Las redes sociales nunca han sido el mejor lugar para el debate sosegado. Y menos cuando se mezclan algunos de esos nombres susceptibles de provocar acaloradas argumentaciones. El del millonario gallego Amancio Ortega en su faceta de filántropo suele ser uno de ellos. Y el comunicado de la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Aragón (FADSP) en el que se argumentaba contra la donación de 10 millones de euros para que el Gobierno de Aragón los destine a la adquisición de aparatos contra el cáncer, encendió la mecha.

La información publicada primero en la edición en papel y luego en la versión digital del periódico logró centenares de miles de visitas y el enlace corrió de conversación en conversación de WhatsApp y a golpe de compartido en las redes. Poco después se añadió como contexto el perfil de la FADSP y se precisó que la donación en sí estaba fuera del debate ya que se presentó en público el tres de mayo.

Pero las interpretaciones eran variadas y crecían por su cuenta, especialmente cuando algunos colectivos del conocido como extremo centro ofrecieron algunas asociaciones inéditas en las que se mezclaban, dependiendo del origen, los nombres de Javier Lambán y Pablo Echenique, las referencias a Podemos y a cualquier colectivo de izquierdas y, cerrando el círculo vicioso, las lamentaciones por la incidencia del cáncer.

La asociación que lanzó el comunicado se muestra desbordada por la repercusión de sus argumentaciones. «Nosotros no cuestionamos la necesidad de un tratamiento para los enfermos de cáncer, únicamente queremos poner en cuestión una donación muy relacionada con las privatizaciones de la sanidad pública», explicó la portavoz del organismo sanitario, Isabel Monserrat.

Desde la asociación sospechan que algunos de los comentarios que han recibido forman parte de un «debate interesado» para opacar la reivindicación de fondo. Además, rechazaron de plano cualquier vinculación política. «No tenemos nada que ver con Podemos: en la asociación hay personas de todos los ámbitos», indicó Monserrat.

En pleno debate sobre el auge de las verdades a medias con objetivos propagandísticos sorprenden titulares como Podemos hace ascos a una donación de Amancio Ortega para enfermos de cáncer, No quieren el dinero de Amancio Ortega o La izquierda, ¿sectaria o simplemente idiota? Todos de cabeceras más o menos acreditadas en los que la cuestión de fondo pasa a un segundo lugar. Por otro lado circulan los mensajes de personas anónimas con elevados niveles de agresividad.

Algunas asociaciones en defensa de las sanidad mostraron su apoyo al comunicado de la FADSP, que se ha repetido en Canarias, País Vasco y Galicia. Por el momento, y para evitar más especulaciones, la DGA ya ha anunciado el destino de los fondos recibidos. La fundación Ortega decidió no entrar en el rifirrafe.