Los dos ocupantes de un todoterreno fallecieron ayer de madrugada al salirse de la carretera autonómica A-130 (Graus-Francia por Benasque) y precipitarse por el cauce del barranco de Eriste, en el término municipal de Sahún. En el rescate participaron numerosos efectivos y se prolongó durante varias horas, ya que había que peinar el lugar al desconocerse el número exacto de ocupantes del vehículo.

La Subdelegación del Gobierno en Huesca informó de que las dos víctimas del siniestro, J. G. L., de 30 años, vecino de Villacañas (Toledo), y C.M.B., de 29, vecino de Madrid, se salieron de la calzada por causas desconocidas en torno a las 3.15 horas. Viajaban en un todoterreno BMW, con matrícula 1737-CWJ, alquilado sin conductor por una empresa. Tras su rescate, los cadáveres fueron trasladados al depósito de Benasque.

Al lugar del siniestro acudieron unidades de Bomberos y de las ambulancias del 061 y efectivos de las unidades de Tráfico y de Rescate en Montaña de la Guardia Civil, según comunicó la Subdelegación del Gobierno. En un principio se encontraron los dos cadáveres, pero se mantuvo la búsqueda de más posibles víctimas.

Los especialistas de la Benemérita se desplazaron con la misión de reconocer el cauce del barranco. Trabajaron en el rastreo durante horas sin encontrar signos de que hubieran más implicados en el accidente de tráfico.

Por otra parte, un montañero sufrió ayer heridas graves al caer en la cara Sur de Peña Parda-Sierra de la Partacua, en el término municipal de Biescas. El deportista, I. E..A., de 31 años, vecino de Azkoitia (Guipúzcoa), fue trasladado al Hospital San Jorge de Huesca, donde quedó ingresado. Las labores de evacuación fueron llevadas a cabo por efectivos del Grupo Especialista en Rescates e Intervención en Montaña (GREIM) de la Guardia Civil de Panticosa. Los agentes se trasladaron en un helicóptero hasta el lugar del accidente en un helicóptero.