El Ministerio de Sanidad financiará por primera vez y a partir de este miércoles dos fármacos para dejar de fumar, la vareniclina (de marca comercial Champix) y el bupropion, que pueden beneficiar a 83.800 personas con problemas de adicción al tabaco en todo el país.

Ambos fármacos se incluyen a partir del 1 de enero en la prestación farmacéutica, con un impacto presupuestario de 7,9 millones de euros el primer año, según aseguró la ministra María Luisa Carcedo.

El tabaquismo es un problema de salud púbica y supone la principal causa de enfermedad y de muerte prematura evitable en España (cada año se contabilizan una media de 51.870).

La titular de Sanidad ha destacado que el éxito en la cesación tabáquica en personas que lo hacen sin ayuda es del 5 % frente al 30-40 % en aquellas que siguen un tratamiento farmacológico específico y cuentan con apoyo psicológico.

Según ha explicado el ministerio en un comunicado, el coste del tratamiento por día será de aproximadamente 3,55 euros por persona en el caso de la vareniclina y de 1,03 euros en el caso de bupropion (incluido el IVA).

Así, una persona con una aportación farmacéutica del 40 % pagaría 1,42 euros/día en el caso de la vareniclina y 0,41 euros en el caso del bupropion.

El tratamiento se prologa durante 12 semanas y la prescripción se efectúa por un mes, tras el que se valora su efectividad antes de emitir la siguiente receta.

Cada prescripción se realizará por un envase, lo que equivale a un mes de tratamiento. Tras ello, el médico, en el marco del seguimiento del programa de deshabituación tabáquica, deberá valorar la evolución de la efectividad del tratamiento con carácter previo a la emisión de la siguiente receta.

El tratamiento completo tiene una duración de entre nueve y doce semanas y la sanidad pública financiará un intento anual por paciente para dejar de fumar.

Será en la Atención Primaria donde se defina qué profesionales médicos se van a encargar de esta prestación que se financiará bajo receta electrónica a pacientes que estén incluidos en algún programa de apoyo individual o grupal y cumplan los criterios establecidos.

Estos son: tener motivación expresa de dejar de fumar constatable con al menos un intento en el último año, fumar diez o más cigarros al día y tener un alto nivel de dependencia. EFE

El tabaquismo continúa siendo la principal causa de morbimortalidad en nuestro país, y a nivel mundial. En España se estiman en 51.870 las muertes atribuibles al consumo de tabaco anualmente, presentando una evolución distinta según sexo: una tendencia a la disminución en los hombres frente a un aumento en las mujeres, en las que las muertes por cáncer de pulmón se han duplicado en los últimos 20 años, relacionado con su incorporación progresiva al consumo de tabaco.

Fuentes del Gobierno de Aragón apuntan que en la Comunidad el porcentaje de personas entre 15 y 64 años que fuman diariamente es de cerca del 36 por ciento (un 57,3 % son hombres).

Además, la incorporación al consumo de tabaco entre los más jóvenes sigue presentando un nivel preocupante, ya que casi el 30% de los adolescentes aragoneses escolarizados entre 14 y 18 habrían fumado en los últimos 30 días, un 13,4 % de forma diaria.