El magistrado del Juzgado de Instrucción número 3 de Teruel, Jerónimo Cano, tomó declaración ayer a dos imputados más en el caso del fraude de medicamentos en farmacias de toda España. Quienes pasaron por su despacho fueron Bartolomé C., un granadino que había acudido con anterioridad como testigo y una farmacéutica, Teresa B.

El juez Cano también volvió a llamar a José A., almacenista y farmacéutico que forma parte de los casi 50 imputados que tiene esta causa denominada Operación Convector. Por otro lado, testificó Ángel G., abogado del colegio de farmacéuticos de Zaragoza.

En esta operación de carácter nacional resaltan 14 farmacias que, según la investigación de la Guardia Civil, exportaron 1.460.000 euros en fármacos con destino a Europa. Una forma de actuar que, tal y como descubrieron los inspectores del Instituto Aragonés de Salud, los enfermos de párkinson se llegaron a quedar desabastecidos.

De todas las farmacias aragonesas implicadas, la investigación resalta que las de Cariñena, Peñarroya y Palomar de Arroyos fueron las que más medicamentos revendieron.