La Guardia Civil intervino durante la madrugada de ayer un alijo de 3.240 kilogramos de hachís y detuvo a tres personas, dos de ellas residentes en Zaragoza, en una operación contra el tráfico de drogas realizada en el puerto deportivo de Vinaroz (Castellón), según fuentes de la Comandancia del Cuerpo en esa provincia.

La operación comenzó en la noche del pasado jueves, cuando una patrullera del Servicio Marítimo procedió a identificar una embarcación de tipo velero que navegaba en las proximidades del citado puerto y obligó a sus tripulantes a dirigirla al mismo.

Una vez en el recinto, los agentes descubrieron en el velero 108 fardos de unos 30 kilos de peso que contenían hachís, por lo que detuvo a los tres tripulantes del barco.

Los detenidos fueron identificados como M. A., de 43 años y, nacionalidad marroquí, domiciliado en Tarragona, y los zaragozanos A. M. F., de 31, y J.B.T., de 37,

Según el jefe del Servicio Marítimo, Manuel Teixide, "llevábamos detrás de este grupo desde hace bastante tiempo, ya que -aclaró- pensábamos que estaban cambiando los cauces de entrada de droga en la provincia, puesto que antes los servicios se dirigían más a las embarcaciones semirrígidas. Creemos que la droga puede proceder de Marruecos y podría estar de paso en Castellón hacia otras provincias e, incluso, hacia Europa".

VÍA MARÍTIMA Desde que comenzó el actual mes de mayo, el Servicio Marítimo de la Guardia Civil ha desarrollado numerosas operaciones contra el tráfico de hachís que se transporta a la península en embarcaciones. En este periodo de tiempo, se han intervenido dos barcos en Cádiz y otros tres en Almería, Ibiza y Málaga, respectivamente.

Ayer fue interceptado un alijo de 1.800 kilos transportado en zodiacs a Canarias, e incluso, el pasado día 9, también se descubrió navegando por el río Guadalquivir una gabarra cargada de droga. En estas operaciones se han intervenido alrededor de 15 toneladas de hachís.

España es un país de paso en la ruta del hachís que se produce en el Magreb y que se distribuye al resto de Europa. Además de los cargamentos que se transportan por vía terrestre ocultos en las cajas de camiones, la utilización de barcos, especialmente de pesca, es muy habitual por parte de las redes de traficantes, ya que les permite un mayor desplazamiento de mercancías.

Algunos de los barcos interceptados durante los últimos días intentaban sortear España y trasladaban directamente los alijos a suelo francés.

Las últimas operaciones han permitido averiguar que los traficantes utilizan cada vez más veleros y yates de recreo, que se dirigen a puertos deportivos en un intento de burlar la vigilancia aduanera.

Entre los españoles detenidos en estas operaciones hay presuntos traficantes muy jóvenes, como uno de 18 años cuyo yate fue interceptado el pasado miércoles por una patrullera frente a Roquetas de Mar.