La Diputación de Huesca (DPH) reunió ayer a los ayuntamientos donde se han proyectado las primeras depuradoras de la provincia que emplean sistemas ecológicos. El objetivo era dar a conocer las características técnicas de unos sistemas que utilizan tecnologías extensivas y diferentes soluciones más sostenibles y rentables. De forma piloto, se plantean en tres pequeñas poblaciones del Pirineo (Bielsa, Fiscal y Sahún), cuyos alcaldes estuvieron presentes.

El diputado Fernando Sánchez dio a conocer los detalles de este modelo de depuradoras ecológicas, junto a Pedro Arrojo y Álvaro Real, en representación de la Fundación Nueva Cultura del Agua y el Centro de las Nuevas Tecnologías del Agua respectivamente, desde donde han llevado a cabo el diseño y redacción de los proyectos, que beneficiarían a los núcleos de Javierre, Albella, Ligüerre de Cinca y Sahún.

El coste de las depuradoras, en función de la población atendida, varía entre los 89.000 y los 283.000 euros, unas cantidades que los municipios no pueden sufragar en solitario, por lo que sus representantes y los de la DPZ hablaron de la necesidad de implicar económicamente al Ministerio de Medio Ambiente y al Gobierno de Aragón.

Hasta ahora, en Aragón solo funciona una depuradora ecológica, instalada en la localidad zaragozana de Fabara. Cuentan con numerosas ventajas, sobre todo sus costes de mantenimiento, que, como se explicó ayer, oscila entre los 7.000 y los 11.000 euros anuales.

La diputación oscense ha corrido a cargo de los proyectos, que han tenido un coste global de 60.000 euros y detallan las prescripciones técnicas de las instalaciones, que ayer fueron detalladas por Pedro Arrojo.