El estudio de la vida cotidiana en La Cartuja de Las Fuentes será mucho más sencillo a partir de ahora tras la adquisición, por 3.000 euros, de un libro de actas del monasterio que estaba en manos de una familia de Pallaruelo de Monegros desde la segunda desamortización de Mendizábal, en 1836.

Así, el Libro de actas del capítulo de la comunidad de Nuestra Señora de las Fuentes (1672-1834) se considera un documento «excepcional y único» para conocer la historia de un conjunto monumental adquirido por la Diputación Provincial de Huesca (DPH) en el 2015. Esta misma institución es la que ha comprado esta pieza patrimonial.

El coordinador de los equipos de restauración y actuaciones del cenobio, José Miguel Pesqué, califica de «regalo para historiadores» el contenido de esta obra. Contiene datos detallados sobre las obras y reformas que se hicieron en el interior del monasterio en aquellos años, compras de ganado o entradas y salidas de cartujos y el resto del personal. «Nos permitirá descubrir la vida cotidiana en el interior de La Cartuja, algo que siempre fue difícil», destaca.

La cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes, que se encuentra en el termino municipal de Sariñena, fue catalogada en el 2002 como Bien de Interés Cultural (BIC). El libro adquirido por la DPH se sumará al patrimonio artístico de la institución y de digitalizará para evitar su manipulación habitual. «Es mejor no tocar mucho el original», reconoce Pesqué. Por ese motivo también se ofrecerá una transcripción completa de su contenido. Esta pieza ya fue expuesta (y catalogada) para exposición Fray Manuel Bayeu: cartujo, pintor y testigo de su tiempo. En aquella ocasión se firmó un seguro por 5.000 euros.

La institución provincial ha explicado que tras la desamortización de Mendizábal, que supuso la supresión de la comunidad de la Cartuja de las Fuentes, sus propiedades inmuebles fueron subastadas y pasaron a manos de Francisco Romeo Martínez de Bengoa, y los bienes muebles de mayor valor e importancia fueron repartidos por los cartujos entre distintas familias notables de la zona.

Entre ellas, se encontraba la casa de los Ruata, de Pallaruelo de Monegros, a la que los monjes entregaron, según la tradición oral, objetos provenientes de La Cartuja, entre los que se encontraría el citado libro de actas. Ahora, lo han comprado a esta familia, después de una «fructífera negociación». Su vicepresidenta, Elisa Sancho, destacó que este libro es «un documento excepcional y único» que tiene un gran valor «por su antigüedad».

La DPH es conocedora de otras obras procedentes de las diferentes desamortizaciones del siglo XIX y está en negociaciones iniciales con otras familias, aunque todavía no se ha concretado ninguna otra transacción. Entre los bienes que se podrían recuperar se encuentra uno de los bocetos de las pinturas que decoran el templo monegrino.

Por otro lado, Pesqué recordó que a lo largo de este 2020 en la cartuja se van a desarrollar varias inversiones con el objetivo de completar su restauración. La intención es recuperar el edificio de la portería como centro de visitantes, así como restaurar el atrio, los claustros y otras zonas del interior. Todas estas actuaciones dependerán de un plan director que completará la inversión hasta ahora de un 1,5 millones de euros. También se trabajará en la llamada Casa de las Obediencias.

El recinto está abierto al público los sábados, domingos y festivos nacionales con dos visitas cada día, una que comienza a las 11 horas y otra a las 12:30 horas.