El PSOE y el PP protagonizaron el enésimo rifirrafe por el autobús que presta servicio a la Plataforma Logística Plaza y al aeropuerto. Ayer, en la comisión de Servicios Públicos del ayuntamiento, para echarse la culpa mutuamente sobre el estancamiento de la propuesta de segregación de la línea que trasladó el Gobierno de Aragón al consistorio a través del Consorcio de Transportes. Una idea que era tan positiva para los usuarios y la ciudad que lleva meses guardada en un cajón. Así que se enzarzaron para recriminarse el parón y la teniente de alcalde Carmen Dueso explotó para acusar directamente al consejero de Obras Públicas y Transportes de la DGA, Rafael Fernández de Alarcón, de haber bloqueado su propia iniciativa por no haber querido asumir el coste del déficit que representaba un bus directo entre la plaza Emperador Carlos V y Plaza.

Dueso aseguró que la respuesta municipal ya se ha producido. En ella, Zaragoza le contestaba que "los 700.000 euros de déficit anual" los debería asumir el Gobierno aragonés, y mantener la titularidad de ese servicio sin fecha de finalización, ya que Alarcón proponía sufragar ese coste pero "solo hasta el 2017". Y que fuera el consorcio quien la gestionara. "Desde entonces no ha habido respuesta", añadió.

Fue la respuesta a las acusaciones del edil conservador Sebastián Contín, que trasladó esta pregunta por el malestar evidente de los usuarios, "que les cuesta más tiempo llegar al aeropuerto que volar hasta París o Bruselas". Un perjuicio para la línea del aeropuerto, que Dueso aseguró que seguiría manteniendo el consistorio y que ahora supone "dar una vuelta enorme por el polígono Plaza".

Una realidad incontestable que la sufren sus pasajeros y también los gestores de la línea, ya que, junto a la reducción de la oferta de vuelos en el aeropuerto, afecta directamente al uso, y por tanto a la subvención pública para mantenerla en servicio. "Ofrézcale que asuman el déficit per secula seculorum", instó Contín. "Dígaselo usted también", replicó Dueso.