El Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA) lidera el diseño del proyecto LIFE IP Ebro Resilence, cuyo objetivo es reducir el riesgo de inundación en el eje del Ebro, que se presentará para su cofinanciación ante la Unión Europea el próximo mes de septiembre.

Esta iniciativa tiene como objetivo implantar las medidas para reducir el riesgo de inundación y mejorar el estado del tramo medio del Ebro, afectado por frecuentes episodios de crecidas, explica en una nota el ministerio.

La UE ha aprobado la cofinanciación para la asistencia técnica que redacta la propuesta de proyecto, en el que están implicados, por parte del Ministerio, la Confederación Hidrográfica del Ebro y la Dirección General del Agua, y también las Comunidades Autónomas de La Rioja, Navarra y Aragón.

De ser aceptada por la Comisión Europea, en abril de 2019 se presentaría el proyecto definitivo con las acciones a ejecutar entre 2020 y 2027.

La propuesta está encaminada a la implantación de las medidas previstas en el Plan de Gestión de Riesgo de Inundación del Ebro (PGRI Ebro) entre Logroño (La Rioja) y La Zaida (Zaragoza).

Este tramo presenta claras afecciones durante los episodios de avenida y que, además, tiene unos valores ambientales importantes, perteneciendo en su mayor parte (63,5 %) a espacios de la Red Natura 2000 o con otras figuras de protección, y existiendo en ella diversas especies protegidas e incluso en peligro de extinción.

En el proceso de elaboración de la propuesta previa están ya implicados tanto los socios como los colaboradores. Además, durante la redacción se desarrollará un proceso de participación pública para todos los interesados en el territorio ámbito del proyecto.

Las medidas del PGRI Ebro implican a diversas administraciones y competencias, de ahí que la colaboración y las medidas consensuadas van a ser uno de los puntales de la propuesta.

El proyecto LIFE IP Ebro Resilience ha sido dividido en seis áreas de interés que incluyen, entre otras cuestiones, la adaptación de los elementos vulnerables al riesgo de inundación (actividades agropecuarias, edificaciones, instalaciones y servicios esenciales), así como el desarrollo de capacidades sociales a través de un programa de concienciación y mejora del conocimiento de gestión de los riesgos de inundación entre actores sociales afectados, con actividades divulgativas y jornadas formativas.

Además de la disminución de la peligrosidad por inundación, comprende actuaciones para la recuperación del espacio fluvial, la optimización de los elementos de defensa longitudinales existentes y la mejora de la capacidad hidráulica del río o la contribución al cumplimiento de objetivos ambientales de la Directiva Marco del Agua, mediante la recuperación de la continuidad longitudinal fluvial y la mejora de la calidad del agua.

También incidirá en la contribución al cumplimento de los objetivos de la Directiva de Hábitats y Especies, a través de la protección y creación de hábitats para especies en peligro de extinción y de otros hábitats de interés, y del control de especies exóticas invasoras.

Además se contempla la creación del Banco de Hábitats del eje del Ebro, una actuación piloto para el establecimiento de un banco de hábitats en el eje del Ebro, identificando territorios con hábitats de interés ecológico, su valoración, y la consideración de medidas de mejora ambiental y su valoración económica para propiciar la inversión de otros agentes en su desarrollo.