El vicepresidente de la sociedad municipal de Ecociudad, Alberto Cubero, ha anunciado que el consejo de administración, dominado ahora por ZeC y sin presencia de la oposición, aprobó iniciar los trámites para remunicipalización de la depuradora de La Almozara y la planta de recuperación de aguas.

El también consejero municipal de Servicios Públicos y Personal, Alberto Cubero, ha explicado que esperará a la actualización de los informes técnicos, que hace dos años fueron favorables y estimaron un ahorro de 500.000 euros para las arcas públicas con la municipalización, aunque la propuesta decayó por el rechazo de PP, PSOE y Ciudadanos, que entonces ostentaban la mayoría en el consejo.

La gestión pública del ciclo integral del agua formó parte de un pacto social firmado por la pasada Corporación y está incluido en el programa de los partidos mayoritarios en el Ayuntamiento, pero "incomprensiblemente" se bloqueó hace dos años, ha recordado.

El actual contrato vence en mayo de 2019, por lo que la intención es que la remunicipalización esté aprobada meses antes para tener tiempo para poder acometer todos los trabajos previos, ha señalado, aunque no ha concretado una fecha.

Cubero ha insistido en que el Gobierno de ZeC es favorable a la municipalización de todos los servicios en los que pueda producirse ahorro económico y una mejora de la calidad de los servicios y en el empleo, así como la gestión "cien por cien" pública del ciclo integral del agua.

No obstante, ha reiterado que otros servicios externalizados, como el de saneamiento, no concluyen próximamente.

El consejero ha dado cuenta también de la aprobación ayer por el Consejo de Administración de un plan director para Ecociudad con el horizonte del año 2030.

En este sentido, ha manifestado que la sociedad municipal no ha contado con ningún plan director ni con líneas estratégicas desde su creación y que ha funcionado simplemente "gestionando el día a día".

La idea fundamental del plan director es la gestión pública del agua como un derecho para los vecinos y seguirá los principios del pacto social por el agua suscrito en la anterior legislatura.

Las cuatro grandes líneas del plan son la gestión integral de todo el ciclo del agua, que ahora está en manos de Ecociudad y de distintos servicios municipales; la renovación y modernización de todas las infraestructuras de saneamiento, incluida la introducción de mejoras tecnológicas en el sistema; la limitación de la gestión privada y la participación y la transparencia en la gestión.

Sobre esto último, ha recordado que ya se han ido desarrollando algunas iniciativas, como la publicación de todas las actas, acuerdos y contratos, o la apertura del consejo a las asociaciones vinculadas o afectadas por algún punto del orden del día.