El futuro Mercado Central de Zaragoza será un edificio que se iluminará por las noches cuando reabra las puertas al público en el próximo otoño. Una iluminación «neutra» y nada estridente que la aportarán los numerosos puntos de luz, con tecnología led que se han estado instalando en las últimas semanas en la cubierta y que ha fabricado la firma IGuzzini para el edificio. En breve está previsto realizar las pruebas para un resultado que se debe garantizar en «blanco calado a 3.000 grados Kelvin», en el exterior y desde el interior, de forma indirecta. Esta empresa, además, se encarga de la iluminación de los tarjetones de cada puesto del mercado, los rótulos donde se especifica el nombre y tipo de productos que venden, que a diferencia del anterior edificio, sí se resaltarán y darán una apariencia «más atractiva» a los mismos. La iluminación exterior permanecerá, principalmente, en el horario de apertura de los establecimientos de restauración.
