Los grupos de la oposición harán balance a final del año de cómo se ejecuta el presupuesto del Ayuntamiento de Zaragoza porque se augura un porcentaje bajo que estará muy marcado por el clima de tensión y crispación que se vive en el salón de plenos desde el pasado mes de febrero. Un vistazo a los datos de ejecución provisional, publicados por el Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) en el portal de transparencia apuntan que, a falta de cinco meses para acabar el ejercicio, ronda solo el 40% del total. Queda mucho por hacer.

Un total de 752,99 millones de euros conforman el presupuesto de la capital aragonesa para este año y, a fecha del pasado 31 de julio, el gasto neto contabilizado era de 333.560.094 euros. Teniendo en cuenta que gran parte del mismo, en torno al 85%, se destina al pago de los servicios y que no hay ya impagos a las contratas en Zaragoza, lo que más puede preocupar es la evolución del capítulo de inversiones. En el actual ejercicio había proyectados 69,1 millones de euros y es obvio que hay proyectos que ni siquiera se han licitado. Y puede que no sea el clima propicio para alcanzar acuerdos en el salón de plenos, mayorías que los puedan llevar pronto a contratación.

También hay que tener en cuenta que el nivel de ejecución a estas alturas del año suele ser bajo, en comparación con el que acaba siendo en diciembre. La duda es la evolución que se dará en el último cuatrimestre. Al menos el gasto se acompasa al nivel de ingresos, que a estas alturas ya ha conseguido reportar 365.418.358 euros de los esperados. Queda la última tanda del IBI, en septiembre, que es la principal fuente de ingresos municipal.

Mientras, otro indicador apunta a un cumplimiento importante con los proveedores. Ya se han contabilizado 11.773 facturas en el actual ejercicio, por un valor 145.469.345,94 euros, y ya se han abonado 135.614.676,85, más del 90%.