Casi cuatro años después de su apertura, el aeropuerto de Huesca-Pirineos se encuentra en la cuerda floja. Tras la suspensión, hace solo unos días, de la escuela de pilotos barcelonesa Top Fly, Pyrenair es la única compañía que mantiene su actividad. Lo hace, además, durante solo unas semanas al año, las de la temporada de esquí, una cifra insuficiente para garantizar la rentabilidad del centro.

Top Fly contaba con una treintena de alumnos, todos ellos de aerolíneas chinas. Los trabajadores oscenses fueron trasladados al centro de Sabadell, donde la empresa ha presentado un expediente de regulación de empleo. Así, no es previsible que la compañía vaya a regresar a Huesca.

La cifra de pasajeros siempre ha sido baja. En el 2009, el aeropuerto oscense fue el cuarto con menos viajeros de todos los gestionados por Aena, solo por delante del de Madrid-Cuatro Vientos y los de Sabadell y Son Bonet, que no tienen ninguno. Este enero, en plena temporada de esquí, esta cifra se quedó en un séptimo puesto --de un total de 49--, por delante de Logroño, Córdoba, Albacete, Madrid-Cuatro Vientos, Sabadell y Son Bonet.

CANCELACIÓN Este fin de semana, Pyrenair decidió suspender toda su operativa de vuelos en el aeropuerto de Lérida-Alguaire ante la falta de rentabilidad. Había comenzado a operar en las instalaciones el pasado 23 de enero, con conexiones a Vigo y Madrid, con ocupaciones que al principio se habían calificado de "excelentes" en este último caso.

La compañía garantizó la viabilidad de sus rutas en Huesca para esta temporada "pese a la coyuntura económica y en un año especialmente complicado". En principio, aseguró que continuará trayendo esquiadores al Pirineo hasta el próximo 11 de marzo. El 2010, tras suprimir los vuelos a Sevilla y Londres, Pyrenair cerró la temporada con 31.432 esquiadores, casi 6.500 más que en el año anterior. Lo que pase el que viene está por ver.

El presidente de Pyrenair, Hugo Puigdefabregas, rechazó ayer pronunciarse sobre la situación, aunque reconoció que la coyuntura "es difícil" y apuntó que esta empresa es la única "que está haciendo un esfuerzo" para mantener en marcha las instalaciones.

Desde la prudencia, el secretario general del PSOE altoaragonés y presidente de la Comisión de Fomento del Senado, Jose María Becana, evitó adelantar acontecimientos y valoró que la situación actual no tiene por qué condicionar el futuro. "Estamos en un mal momento económico, pero Pyrenair sigue operando y está fuerte en la provincia", dijo. A su juicio, las soluciones tendrán que pasar por desestacionalizar la actividad del aeropuerto al mismo tiempo que la del turismo oscense, algo que dependerá, no solo de Fomento, sino también de los agentes locales y provinciales. Por el momento, eso sí, no hay nada sobre la mesa.