Al pionero Centro de Astropartículas y Física de Altas Energías de Aragón le quedan unos meses para ser una realidad. El catedrático de Física Teórica y director del Centro de Ciencias de Benasque, Manuel Asorey, es una de las personas que más ha peleado por crear este centro.

—¿Aragón está a un paso de convertirse en referente mundial de la Astrofísica?

—Sin duda. Poner en marcha el Centro de Astropartículas y Física de Altas Energías va a ser un impulso. Atraeremos gente de fuera, mantendremos contacto directo con Madrid y también internacional. Vivimos un momento muy importante porque se están conjugando todas las fuerzas que hasta ahora estaban dispersas en una única dirección.

—¿A qué fuerzas se refiere?

—Hablamos de un campo arduo, aunque ahora mismo es emergente a nivel mundial. Ahora tenemos investigaciones en el Laboratorio Subterráneo de Canfranc, en el Observatorio Astrofísico de Javalambre y en la Universidad de Zaragoza. Combinar todo eso en un mismo centro nos va a permitir que se consigan resultados mejores y, además, dará visiblidad internacional y nacional a la ciencia que se hace en Aragón.

—Ha sido elegido líder de este proyecto y, previsiblemente, será el director del centro. ¿Cumple Manuel Asorey un sueño?

—Evidentemente esto no surge de la noche a la mañana. Llevo más de 15 años trabajando en esta idea y forjando este proyecto. Nace de la colaboración de muchas personas que sentíamos lo mismo y que, en un momento propicio, hemos dado el paso.

—¿Percibe un mayor interés en los últimos años por la Física y la Astrofísica?

—En Aragón hay un grupo importante de investigadores jóvenes que se han incorporado a esta rama. Son muy buenos, con muchas iniciativas e impacto internacional. Partimos de una buen base y eso sí es algo nuevo respecto a años anteriores. Por otro lado, tenemos potencialmente muchísimos estudiantes en Aragón que ya están interesados en participar en iniciativas de astrofísica y que, seguramente, van a encontrar trabajos cuando terminen.

—En la Universidad de Zaragoza se pondrá en marcha, en un parde años, el máster de Física del Universo. Hay quien lo califica de «bombazo mundial».

—Lo es porque este tipo de másteres único en España. Cuando lanzamos la idea no había ninguno y sigue sin haberlo, aunque en Cantabria están diseñando una iniciativa parecida. Allí también disponen de un centro, pero no es exactamente como el que habrá en Aragón. Hay jóvenes que tienen interés en ese máster, por lo tanto se vislumbra que localmente habrá un buen equipo.

—Y tendrán trabajo asegurado.

—Sí, pero se tendrán que ir fuera. Se trata de una rama con muchas colaboraciones mundiales y colectivos de gente, porque no está localizada en una sola región. Asia, es una referencia. Lo importante para Aragón es formar a jóvenes en este campo y exportar talento.

—¿Para cuándo prevén los primeros resultados del Centro de Física y Astropartículas?

—Esperamos que a final de año. Ya se ha informado últimamente de hallazgos en Canfranc con el proyecto Anais sobre el enigma de la señal de la materia oscura.