Los juristas aragoneses consideran que las modificaciones en preparación para el decreto que regula la adopción de menores, como la elevación de la edad máxima de los padres, no cambiarán la esencia de la normativa, que consideran demasiado restrictiva para los adoptantes.

"Los problemas seguirán existiendo a la hora de intentar acceder a la adopción", afirma Víctor del Moral, abogado zaragozano especializado en Derecho de familia que cada año defiende a una media de tres a cinco familias que han sido consideradas "no idóneas" por el Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS).

Para Del Moral, pese a los cambios normativos en marcha, "la última palabra a la hora de otorgar la adopción la sigue teniendo la Cruz Roja, que es el organismo que elabora los informes que reconocen o descartan la idoneidad de los adoptantes".

En opinión del letrado, "en ocasiones, el equipo psicosocial de la Cruz Roja es un muro frente al que se estrellan las ansias de adopción de muchas personas, cuando en realidad su papel debería ser el de ayudarlas a superar todos los requisitos".

Las familias o personas que, a título individual, desean adoptar un menor y ven sus expectativas frustradas tienen, como último recurso, la vía judicial. El juez, en estos casos, decide en función de las pruebas periciales practicadas por la Cruz Roja, los peritos judiciales y los propuestos por el letrado de los padres considerados "no idóneos".

Sin embargo, según Del Moral, pese a que los adoptantes suelen ganar en primera instancia, "la táctica de la DGA es recurrir en apelación hasta el final, pues nunca paga las costas, con lo que las pretensiones de adopción de los padres se ven aplazadas continuamente".

De hecho, José Luis Quintilla y Maribel Casanova, dos padres oscenses que han visto recientemente denegada la adopción de una niña china debido a la edad de la madre (49 años), ha decidido no recurrir a la vía judicial.

"Tenemos más fe en una decisión política", afirmó ayer Quintilla. "La justicia es demasiado lenta".

"La ley --afirma, por su parte, Víctor del Moral-- puede ser amplia y abierta, pero el equipo psicosocial de la Cruz Roja dispone de artículos que ponen cortapisas a los deseos de los futuros padres, o formula preguntas capciosas cuyas respuestas interpreta luego desfavorablemente para los adoptantes".