Joaquín Bravo, presidente de la Federación Aragonesa de Deportes de Invierno, considera que accidentes como el del sábado empiezan a ser normales. "Cuanto más crece la afluencia de público a las pistas, hay más posibilidades de que se produzcan", señaló. En su opinión, existe un "conflicto" entre esquiadores y surfistas", cuyo número se ha disparado en las últimas temporadas, con mayor peligro para los primeros, y recordó que el año pasado ya se estudiaba la creación de la policía de pistas en el Principado de Andorra. Bravo, que distingue entre los surfistas alpinos y los que realizan acrobacias, que practican en lugares determinados sin riesgo para el resto de los esquiadores, afirma que esta policía de pista "supondrá un mayor gasto que repercutirá en las entradas y en el forfait, aunque merece la pena pagar por estas medidas de prevención".