Dos hospitales aragoneses, el Miguel Servet y el Clínico Universitario Lozano Blesa, ambos en Zaragoza, forman parte de la mayor red nacional de puntos informativos y pruebas de prevención de ictus, puesta en marcha por la Sociedad Española de Neurología.

En la celebración del Día del ictus, el Clínico instala hoy pruebas preventivas de la enfermedad y el Miguel Servet ha organizado un acto científico y también dispondrá de mesas informativas. Ambos actos se llevan a cabo en colaboración con la Asociación de Pacientes de Ictus de Aragón (AIDA) y están impulsados por el Grupo de Estudio de Enfermedades Cerebrovasculares de la Sociedad Española de Neurología (SEN).

Los dos centros, con unidades de ictus, forman parte de una red de 31 puntos informativos en hospitales de todo el territorio nacional. Durante la jornada, el Clínico habilitará un espacio informativo donde se realizarán varias pruebas preventivas de ictus (presión arterial y glucemia) y se proyectarán una serie de vídeos acerca de qué es una Unidad de Ictus para tratar de dar a conocer la enfermedad y ofrecer consejos para su prevención.

El principal objetivo que se persigue este año es incidir en la necesidad de llevar a cabo actividades preventivas así como reconocer las señales de aviso de un posible ictus y la forma de actuar para evitarlo. Esta iniciativa es especialmente relevante si tenemos en cuenta la incidencia de esta enfermedad ya que 1 de cada 6 españoles sufrirá un ictus a lo largo de su vida.

Desde los centros se subraya que el nivel asistencial de Aragón en esta enfermedad es "equiparable" a cualquier país europeo de los más desarrollados y la coordinación entre todos los hospitales aragoneses, con los mismos protocolos.

VIDEOCONFERENCIA La coordinación se expone a través de la red de ictus, en la que mediante videoconferencia los hospitales comarcales --que no disponen de unidades específicas pero si áreas restringidas-- se ponen en contacto con los de referencia, el Servet y el Clínico, para establecer el tratamiento tras explorar al paciente en el mismo lugar, y así evitar el riesgo de traslados muchas veces en la fase aguda de la enfermedad. El tele ictus funciona desde hace año y medio en Barbastro, al que siguieron los hospitales de Huesca y Calatayud y desde hace unos meses el de Teruel. En breve se implantará en el de Alcañiz.

En Aragón se producen entre 2.900 y 3.300 ictus al año y la comunidad autónoma dispone de 17 camas específicas (9 en Unidades de Ictus y 8 en Áreas Ictus).

Alrededor de 6.000 aragoneses, además, padecen actualmente secuelas de una enfermedad que, en el 30% de los casos, avisa a través de accidentes isquémicos transitorios, es decir, entre los que se incluirían la debilidad o trastornos del lenguaje. De ahí la importancia de la prevención, a través de una alimentación sana, ejercicio, no fumar y tomarse la tensión una vez al año a partir de los 40 años.

Además, por primera vez, un lazo naranja identificará a las personas que quieran hacer una labor de concienciación.