--¿Por qué potenciar tanto el turismo chino?

--Es el turista que más interesa por su nivel de gasto. Son los viajeros que más gastan a nivel internacional, superando a Alemania. Según la Organización Mundial del Turismo (OMT) el año pasado gastaron 102 billones de dólares en sus viajes. Es un turista de calidad y eso beneficia la balanza de gastos de España. Este crecimiento va acompañado de un incremento de la clase media en China, lo cual hace que este mercado emergente sea muy potente.

--¿Ocurre lo mismo con el mercado ruso?

--Es otro de los mercados prioritarios. También se está potenciando a nivel general porque tiene grandes ritmos de crecimiento y dejan mucho dinero.

--¿Qué tiene España que tanto gusta?

--Tienen una imagen de un país y una ciudades vitales. Se sienten atraídos por la cultura, la gastronomía y las tiendas. Eso lo encuentran en Zaragoza. Nos ven como un país moderno y abierto. Los chinos que viajan suelen vivir en grandes ciudades y buscan lugares más pequeños, como Zaragoza. Además, valoran mucho el tema de la seguridad. Tienen la percepción de que nuestro mercado es seguro.

--Se ven pocos chinos en la playa.

--La playa no les interesa. Van siempre con sombrilla porque les gusta que el tono de su piel sea blanco. No se sienten atraídos por este turismo.

--En los viajes programados para grupos siempre hay una visita obligada a un centro comercial. ¿Por qué?

--Les gustan las marcas de lujo. España, en su imaginario, está situada en un nivel muy alto en textiles y moda. Para ellos es un signo de poder económico y escala social comprar ropa aquí porque consideran Europa como la cuna del diseño y la elegancia.

--¿Está España preparada para volcar todos sus esfuerzos en este tipo de turista?

--En general se está tomando conciencia del gran potencial del mercado emisor chino y ya se empiezan a ver guiños hacia los turistas chinos en muchos sectores, sobre todo en las tiendas. Para ellos es muy importante encontrar transcripciones en su idioma o detalles como que los desayunos de los hoteles incluyan la sopa o en sus habitaciones haya té. Tienen que sentirse a gusto.

--¿Potenciar tanto este tipo de turismo puede convertirse en una vía de penetración en el país?

--Es el país más poblado del mundo con más de 1.300 millones de habitantes. Muchos están instalados en España y vienen de forma legal. Ahora es cuando este turismo empieza a verse más, antes eran más japonés. Una mala percepción del turista chino sería una equivocación. Es un turista discreto, que no genera follones ni da problemas, no organiza lío ni se emborracha y tiene un alto nivel de gasto.

--¿Cuál es la tarea pendiente?

--Las comunicaciones con China. Se ha mejorado mucho la conectividad con el país asiático. En España hay pocos aviones de líneas directas con Asia. Solo cuatro frecuencias semanales, cuando Alemania tiene 85. Se ha conseguido negociar para que Air China abra nuevas rutas este año desde Barcelona a Pekín y desde Madrid a Shanghái. Cuanta menor es la conexión, más difícil es que vengan.