El Ayuntamiento de Zaragoza tenía ayer la opción de sumarse a la declaración de emergencia climática que hace unos días reclamaban 17 colectivos ecologistas de Aragón y que, poco a poco, va a ir llegando a los municipios. La adhesión la solicitó Podemos-Equo, apoyándose en algunos de estos colectivos, que desde el público remarcaron que el futuro del planeta es «innegociable». El edil Fernando Rivarés logró el apoyo del PSOE y ZeC pero no de la derecha, que se abstuvo facilitando la aprobación, pese a su desacuerdo al considerar que ya hay una Estrategia de lucha contra el cambio climático en vigor.
