El Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) ha condenado a la aseguradora Axa a pagar 77.000 euros a un trabajador víctima de un accidente laboral. Los magistrados rechazaron el recurso interpuesto por la empresa, que consideraba que el andamio de dos metros desde el que se cayó el empleado cumplía con la normativa.

Sin embargo, el alto tribunal confirma la sentencia del Juzgado de lo Social número 4 de Zaragoza que no solo condenaba a la aseguradora, sino que también de forma solidaria al empresario y a su sociedad para abonar a la víctima, defendida por el abogado Guillermo Ros, la cantidad de 85.668,40 euros. Este hombre sufre una incapacidad permanente total para su profesión habitual.

La sentencia señala que el siniestro laboral se produjo cuando descendía por el lateral del andamio y que el hecho de que no excediera de los dos metros de altura, en modo alguno conlleva la exoneración del contratante de toda la responsabilidad. "La obligación del empresario alcanza a evaluar todos los riesgos no eliminados y no solo aquellos específicos", apuntan los magistrados.

Afirman que el accidente se produjo porque el acceso a la superficie del andamio se realizaba a través de los barrotes laterales en los que había una "excesiva distancia entre los mismos".

El TSJA advierte de que el peligro de caída hubiera desaparecido si "se hubiera utilizado un andamio con trampilla interna al que se le hubiera aplicado una escalera o utilizado una de mano para acceder a la plataforma de la estructura".