El sindicado CUT de Autobuses Urbanos de Zaragoza (AUZSA) denunció ayer a través de un comunicado la reducción del horario de verano de las líneas de bus de Zaragoza. Considera que "empeorará todavía más" la calidad del servicio.

A partir de hoy, habrá 53 buses menos en funcionamiento en los días laborables (un 20% de la flota total), 14 menos en sábados (un 7%) y 23 menos en festivos (un 13%).

La línea más afectada, dicen en el texto, será la L-39 ya que su reducción es "casi de un 37%" en días laborables, de un 18% en sábados y de un 31% en festivos. Denuncian que, desde que se recortó el recorrido de la 40, esta línea ha incrementado su número de pasajeros. También sufrirán "considerables recortes" el resto de líneas.

Desde el comité hacen un llamamiento a las asociaciones de vecinos y los consumidores para que "impidan estos recortes" que, a su juicio, son el resultado de seguir primando la realización de kilómetros sobre la calidad del servicio.