La patata caliente cae ahora en el tejado de la sociedad de promoción del aeropuerto (PAZ) y del único socio que asegura querer continuar con las subvenciones a la compañía irlandesa: la DGA. Tras su última reunión con los responsables de la empresa, el Ejecutivo aragonés se felicitó por haber conseguido el compromiso de mantener las seis conexiones internacionales (con Londres, París, Roma, Milán, Bruselas y Bolonia) y las nacionales con Canarias y Sevilla. No se habló entonces de reducir frecuencias en ninguna, cuando además se asumía la pérdida de los enlaces con Málaga y Alicante. Se apuntó que se reforzaría la oferta a Londres o Bruselas, pero aún no se sabe nada.