La empresa española de movilidad sostenible con patinetes eléctricos compartidos Koko ha elegido Zaragoza como la primera ciudad para desarrollar su actividad y desembarcará en la capital aragonesa con 200 patinetes y el visto bueno del Gobierno local.

La empresa, que inaugurará a partir de mañana 11 de septiembre su servicio, ha elegido esta ciudad debido a las "características de su población y su apertura a la innovación", y la ha calificado como un "escenario perfecto para lanzar el servicio y ser pionera de cara a la expansión por España", tal y como ha explicado hoy en un comunicado.

El servicio, que cuenta con una flota de 200 patinetes eléctricos, no dispone de estaciones fijas, ya que usa un sistema de geolocalización a través de la aplicación -disponible en App Store y Google Play-, que facilitará el uso y la devolución de los usuarios que realicen trayectos dentro de la zona determinada por la compañía.

"La ciudad, suma una alternativa más de movilidad sostenible, eliminando coches y reduciendo la contaminación atmosférica y acústica", ha destacado la startup.

El coste será de "15 céntimos de euro por minuto, sin coste de desbloqueo" y su servicio espera ampliarse "en los próximos meses a otras 11 ciudades españolas", gracias al apoyo de la incubadora de empresas emergentes Demium Startups.

"La ciudad de Zaragoza nos ha recibido con los brazos abiertos y estamos muy contentos que nos hayan brindado la oportunidad de desarrollar nuestro modelo aquí", ha comentado el copresidente de la compañía Teo Ortega.

Ortega ha añadido que gracias a su servicio "estamos seguros de que en los próximos meses reduciremos la cantidad de coches, y entre todos haremos una ciudad más sostenible".

Para hacer uso de este servicio, los usuarios deben tener al menos 18 años, y tras descargarse la aplicación y registrarse, el primer paso es localizar un patinete, y al llegar a él escanear mediante la propia aplicación el código QR que tiene visible para desbloquearlo.

A partir de ese momento, la conducción "es intuitiva" y una vez se llegue al destino "sólo hay que dejar el patinete aparcado responsablemente, sin que moleste al tráfico ni a los peatones, dentro de los límites de área especificados" en el mapa de la aplicación y bloquearlo finalmente una vez finalizando el trayecto.

El pago se realizará por minuto, según el tiempo de uso, y no existe tiempo mínimo o máximo siempre y cuando el vehículo tenga batería ha explicado la startup en el comunicado.