La empresa Frutas La Espesa, ubicada en la localidad de Zaidín, en la comarca del Bajo Cinca, permanece cerrada de manera temporal después de que en la tarde de este sábado la dirección general de Salud Pública decretara la suspensión temporal de la actividad al detectarse un brote de coronavirus con ocho casos positivos entre sus trabajadores.

Fuentes cercanas a la firma han explicado que "desde el inicio de la campaña se han tomado todas las medidas de seguridad previstas por las autoridades sanitarias", puesto que la posibilidad de un rebrote en el sector agrícola "es una situación que preocupa mucho a todas las empresas". En su caso, todos los días antes del acceso de los trabajadores a las fincas se les toma la temperatura, se comprueba la correcta utilización de las mascarillas y se cuenta con una alfombrilla desinfectante para los pies. Según han indicado estas mismas fuentes, es el propio gerente de Frutas La Espesa quien ha estado efectuando las pruebas de temperatura a los trabajadores, "cada día a las 6.30 horas".

En cuanto se detectó el primer caso positivo en la finca, ocho trabajadores y miembros de la propiedad de la empresa que tienen más contacto con un número elevado de empleados se sometieron al test serológico, arrojando este, según las fuentes consultadas, un resultado negativo para todos ellos.

Desde la compañía, que atesora una larga trayectoria en el sector frutícola de más de 35 años, reiteran que "lo más importante es la salud", pero recuerdan que "no se puede controlar lo que hacen los trabajadores fuera de su horario de trabajo y el virus no está en esta empresa, o en otra, sino que está en la calle y cualquiera se puede contagiar". Igualmente, han indicado que se han puesto en contacto con el Ayuntamiento de Zaidín por si fuera necesario utilizar las instalaciones previstas para el aislamiento de casos positivos de covid-19, como el pabellón municipal, que podría disponer de manera inmediata de 12 camas, según fuentes municipales.

Durante toda la mañana de este domingo, personal sanitario de Barbastro se ha trasladado a las instalaciones de la finca para efectuar la prueba PCR a unos 150 trabajadores, llamados por turnos a razón de unas 50 personas cada hora, para evitar aglomeraciones. Según ha confirmado el alcalde de Zaidín y presidente de la Comarca del Bajo Cinca, Marco Ibarz, la toma de muestras se ha desarrollado "con normalidad y sin las aglomeraciones que vimos, por ejemplo, cuando se tuvo que someter a las pruebas a los trabajadores de los mataderos de Binéfar". Sin embargo, no se espera que los resultados de estos test lleguen, al menos, hasta mañana.

Desde la compañía de Zaidín destacaron también la "agilidad" con que ha actuado el departamento de Sanidad al responder "al día siguiente" con la realización de los test. Y manifestaron su esperanza en poder retomar la actividad "en pocos días", una vez que se complete el estudio de casos, se detecte a los positivos y se sepa qué trabajadores deben permanecer en aislamiento. "Sino, la fruta se pudre", recuerdan.