La Confederación de Empresarios de Zaragoza (CEZ) manifestó ayer a través de un comunicado su repulsa por los actos de vandalismo en Gran Vía, plaza de Aragón y el paseo de Independencia durante el 20-N y pidirá que se arbitren medidas para que las instituciones se hagan cargo de los perjuicios ocasionados. "Las roturas y pintadas en cristales y fachadas de comercios representan un grave perjuicio económico para sus propietarios, así como para la imagen y el turismo de nuestra ciudad", añade la nota.