El monte de La Oruña es uno de los grandes desconocidos de la comarca de Tarazona y el Moncayo. Se encuentra en un terreno entre los municipios de Vera y de Trasmoz y a él se accede desde la cruz negra que se sitúa frente al Monasterio de Veruela. El monte acogió un asentamiento celtibérico eminentemente industrial. Fue un poblado especializado en la explotación del hierro de Moncayo creado para tal fin y que, una vez finalizada su tarea, fue abandonado por sus pobladores.

La Oruña tiene un gran interés, ya que se trata de un asentamiento nómada y con unas características diferentes al resto de asentamientos. Desde el Centro de Estudios Turiasoneneses se había marcado la recuperación de este espacio como prioritario por su alto valor arqueológico. Ahora que el ayuntamiento ha adquirido los terrenos y que el proceso está en marcha se espera que las catas saquen a la luz piezas de interés que permitan conocer características de la industria celtíbera.