Un grupo de vecinos de Leciñena ha decidido interponer un recurso contencioso administrativo contra las actuaciones del consistorio al considerar que los planes de instalación de una planta de energía eólica en lo que ellos consideran montes comunales pone en riesgo el modo de vida de al menos cincuenta familias. En un comunicado han destacado que este proyecto «pretende sepultar mil hectáreas de suelo agrícolamente fértil» y que por ese motivo «no puede ser considerado racional ni sostenible».

Varias entidades ecologistas se han sumado a este rechazo al destacar que los proyectos Filera I, Filera II, Filera III, Filera IV, Filera V, más Los Leones I, Los Leones II, Los Leones III y Los Leones IV (pensados para las partidas de Recordín y Valseca) «van a alterar brutalmente el territorio con movimientos de tierra para nivelar el terreno y levantar decenas de kilómetros de vallados y de tendidos eléctricos para evacuar la energía».

Según el portavoz de los vecinos la zona que se aceptó en el pleno del consistorio se está trabajando desde los años cincuenta, hasta al punto de que algunas personas tienen vinculados a esos terrenos sus derechos de la PAC. «Lo lógico sería buscar una solución en otras partidas o garantizar las permutas», manifiestan.

Alegan que las personas que han tomado la decisión no tienen en cuenta que el activo que comporta la tierra "ni se puede someter a la decisión de 5, 6 o 7 manos alzadas en un pleno municipal, integrado en su mayoría por personas, que ni conocen lo que costó hacer la tierra productiva, ni les importa nuestro futuro como agricultores".

La empresa Premier Engineering and Procurement SL será la que arrendará los suelos del ayuntamiento para las plantas solares de los proyectos Filera tras negociar con el propio consistorio y que se diera el visto bueno en el pleno. «Nos encontramos en nuestro pueblo con una empresa que no conoce, ni respeta, ni piensa en nuestro entorno, ni entiende de arraigo ni de valores, que pone en duda nuestra honorabilidad como colectivo de agricultores o ganaderos y, lo más triste, nos acusa de actuar de mala fe y en perjuicio del común de los vecinos», lamentan en el manifiesto.

Por el momento creen posible que se revise el proyecto después de que saliera a licitación pública. La campaña actual se desarrollará sin problemas y los terrenos ya están sembrados para una nueva cosecha. «En nuestra mano esta revertir esta situación y defender todos juntos nuestro medio de vida siendo conscientes de que somos muchos los que no queremos que se borre el pasado que los nuestros fueron levantando, el presente que hoy tenemos y el futuro de un sector en Leciñena que, aún con muchos claroscuros, defenderemos, para que tenga continuidad», insisten.

En sus alegaciones ante el servicio provincial de Industria explican que la implantación de estas plantas solares fotovoltaicas «determinará que más de un agricultor deba abandonar su actividad principal, perdiendo la capacidad de generar recursos económicos para su subsistencia y permanencia en su pueblo». Además cree que esos proyectos «entran en franca y abierta contradicción con las políticas que desde todas las restantes administraciones se van a implantar progresivamente para posibilitar la continuidad de la vida en el mundo rural».

Desde Amigos de la Tierra también han presentado alegaciones en contra de dichas plantas fotovoltaicas «por afectar un área crítica de cernícalo primilla». Por otro lado, critican que los proyectos se fraccionen en subproyectos de 49,9 MW, incluso se desliguen de las subestaciones y líneas eléctricas, para evitar una evaluación ambiental rigurosa, algo que califican de «estrategia tramposa y fraudulenta».