Enero todavía no ha terminado pero es ya el segundo peor mes en cuanto a contagios desde que comenzó la pandemia con 17.393 casos, solo por detrás de octubre (22.278). Teniendo en cuenta que en marzo y abril las cifras son poco representativas, puesto que no había capacidad de diagnóstico (se detectaron 2.576 contagios y 2.525, respectivamente) el primer mes del 2021 ha conseguido que se desvanezca la idea de que una vez pasaran las campanadas de Nochevieja y la vacuna hubiese llegado el problema iba a desaparecer. La realidad es que la comunidad roza ya los 3.000 fallecidos por coronavirus, 288 en el presente año y que, aunque el Gobierno de Aragón prevea que los contagios van a ir disminuyendo, los muertos no lo harán. El decalaje, es decir, el retraso entre que se confirma un positivo y que este ingrese y después muera es de varias semanas.

En total, desde el pasado 10 de marzo, cuando se contabilizó el primer muerto con coronavirus en la comunidad, han fallecido ya 2.983 aragoneses por covid-19. Enero ha sido, cuando todavía no se tienen los datos de los últimos días del mes, la cuarta mensualidad más mortífera de la pandemia, con 288 defunciones frente a las 676 de noviembre, las 592 de abril y las 297 del pasado diciembre.

En cuanto a la cifra global de contagios, Aragón suma ya 98.819 casos de covid, lo que supone que el 7,43% de los aragoneses han dado positivo en un test de coronavirus. El mes que más se detectaron fue octubre, con 22.278, pero en enero, que no se queda lejos (17.393), han muerto más personas (288 frente a 281). La cuestión es que en noviembre, cuando la tercera ola en la comunidad comenzó a disolverse, la cifra de muertos ascendió hasta los 676 fallecidos, por lo que se prevé que en febrero, cuando la cuarta ola decaiga, comience a subir el acumulado de defunciones.

La tasa de letalidad: el pronóstico fatal

La tasa de letalidad del virus en Aragón se mantiene en torno al 3%, lo que quiere decir que 3 de cada 100 personas que cogen el covid acaban muriendo. Si la estadística se cumple, de las casi 20.000 personas que se han contagiado después de la Navidad, más de 500 fallecerán en las próximas semanas. Una cifra que asusta y que los expertos creen que se podría haber limitado si se hubiera restringido más la posibilidad de reunirse con los familiares en las pasadas fiestas. Y no es comparable con Navidad, Nochevieja y Reyes, pero está por ver el efecto que tiene San Valero, festivo en Zaragoza, en la curva epidemiológica. Aragón vive instalada en una meseta de casos que no ha bajado de los 500 esta semana y que ha llegado a rozar los 900.

Por el momento, las dos semanas intermedias de la presente mensualidad han sido las peores en cuanto a contagios: se detectaron 4.905 entre el 11 y el 17 de enero y 4.982 entre el 18 y el 24. Desde el pasado lunes van 3.735 más.

Para conocer cómo puede evolucionar la curva de fallecidos es importante revisar las cifras de ingresos. Así, según los últimos datos disponibles, Aragón va a cerrar el mes con 753 pacientes covid en los hospitales: 664 en planta y 89 en las unidades de cuidados intensivos. Quedan libres todavía 1.332 camas de hospitalización convencional y 58 en uci con respirador, pero son 457 personas más que el 1 de enero del 2021.

Así, en 29 días, una vez ha envestido la cuarta ola de coronavirus, ha pasado de haber 47 personas en la uci a que haya ahora 89. En comparación con las cifras que se alcanzaron en la tercera ola, que se dio entre mitad de octubre y mitad de noviembre, las cifras son ahora mejores, pero si los contagios no bajan con rapidez y la meseta se mantiene en el tiempo se parte de una peor situación. El 15 de octubre, cuando la curva epidemiológica comenzó su escalada, había 524 personas ingresadas. Cuando los positivos disminuyeron, el 15 de noviembre, había 949.

Así con todo, los directivos del departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón han advertido ya en más de una ocasión que, aunque la comunidad haya alcanzado el pico de la ola, las consecuencias del incremento de los contagios posnavideño todavía no se conocen por completo. Febrero podrá ser un mes más tranquilo y con menos positivos, pero los ingresos y las cifras de muertos tardarán en descender.