El colectivo de enfermería considera necesarias una serie de mejoras de cara a un «óptimo» funcionamiento en Zaragoza del plan diseñado por el Departamento de Sanidad para la atención de enfermos crónicos, que ya se aplica en Alcañiz, Barbastro, Calatayud, Huesca y que se implantará este mes en el hospital Miguel Servet. Entre ellas, los profesionales solicitan la equiparación del número de enfermeras de Atención Primaria al de médicos, «de tal forma que haya una proporción de uno a uno, algo que a día de hoy no se encuentra ni en todos los sectores, ni en todos los centros», expone Beatriz Sánchez, vocal de Enfermería Comunitaria y Familiar, en la web del Colegio de Enfermería de Zaragoza.

Además, el colectivo también cree necesario que cada enfermera tenga «unos pacientes asignados -lo que denomina cupo-, no como hasta ahora que los pacientes se asignaban exclusivamente al médico», indica la representante de las enfermeras, que participó, la pasada semana, en un encuentro organizado por el Foro Aragonés del Paciente para tratar el tema de la atención integral al paciente con enfermedad crónica que contó con la presencia del director general de Asistencia Sanitaria, Manuel García Encabo.

En este sentido, el personal indica que «el informe de alta actualmente solo llega al médico de familia, aunque la intención es que lo haga también a la enfermera para que se pueda realizar el primer contacto con el paciente, pero esto no puede ocurrir hasta que las enfermeras no tengan a sus pacientes asignados».

En el encuentro, García Encabo habría señalado que la gestión de la demanda de los pacientes «estará vehiculizada por el personal administrativo del centro con una línea telefónica y de e-mail propia, que derivarán a la enfermera correspondiente para su resolución lo más rápida posible», expone Sánchez en la web.

El plan para enfermos crónicos se desarrollará en una ubicación específica en Medicina Interna del hospital, evitando su paso por Urgencias cada vez que se descompensen. «Una vez identificados los pacientes, la inclusión en el programa será competencia exclusiva del médico de familia y se realizará un plan de intervención individual para cada uno, en un formato compartido de historia clínica». «La figura responsable del programa será la enfermera de Primaria. Es la clave del programa y quien canalizará las demandas del paciente», subraya la vocal.