El personal de enfermería del servicio de Urgencias del hospital zaragozano Miguel Servet se quejó ayer de la falta de camas, supuestamente por la escasez de colchones, lo que, en su opinión, provoca que "pacientes que precisan estar en cama tienen que estar durante horas en una camilla", indicaron a este diario fuentes del colectivo sanitario.

La acumulación de camillas en pasillo ha sido, según los enfermeros, una constante a lo largo de una semana marcada por la saturación en Urgencias. Ayer, la situación apenas había mejorado y el propio personal sanitario advirtió de que las esperas en salas de observación a la espera de ser ingresado alcanzaba al mediodía de ayer, en algún caso, las 81 horas y que hasta 43 personas se encontraban a la espera de ocupar una habitación en planta.

Las tres salas de observación habilitadas por el Salud --la tercera se abrió a comienzos de semana-- para satisfacer la demanda continúan a rebosar, con 21, 24 y 18 pacientes, respectivamente. Desde el hospital se asegura que las tres áreas permanecerán abiertas "mientras sea necesario".

Lo que el Salud desmiente categóricamente es la falta de colchones denunciada por los enfermeros. "Es total y absolutamente falso", aseguran fuentes del departamento, que, en este sentido, advierten "a los que están mintiendo con este tema" de que "deberían pensar un poco más en ser más responsables y no crear una alarma social por algo inexistente" porque "no todo vale para criticar al Salud y lo que hacen es una falta de respeto a todos sus trabajadores".

Así, la Administración garantiza que todos los hospitales aragoneses "están totalmente cubiertos en cuanto a suministros, recursos humanos y material".

Respecto a la saturación, fuentes de Sanidad indicaron que "tienen más afluencia de lo habitual, pero está dentro de la normalidad".