Un familiar, un profesional y una portavoz de la plataforma en defensa de la salud mental de Zaragoza comparecen hoy ante la Comisión de Peticiones de las Cortes para defender el mantenimiento de las actuales unidades psiquiátricas en los centros de salud de los barrios.

La plataforma ha comparecido ante este órgano parlamentario para expresar las afecciones que causaría, especialmente a los pacientes, la centralización de las unidades de salud mental en el barrio de Valdespartera y Sagasta.

En declaraciones a Efe, la portavoz de la plataforma, María Ángeles Cardiel, ha asegurado que en Valdespartera la atención que se reciba "no va a ser igual" que en los barrios donde el psiquiatra está en contacto con el equipo de atención primaria y "eso se pierde".

Además de que no garantiza que el paciente sea atendido siempre por el mismo psiquiatra, cuando el de su barrio le conoce a él, a su familia y su entorno y se da una atención "personalizada".

En su propio barrio, el paciente, si es autónomo, puede ir a por sus recetas y a medirse las dosis que debe tomar, lo que va a ser "más difícil" si tiene que desplazarse a Valdespartera.

Cardiel lamenta que después de lo que se ha trabajado por la descentralización ahora se tienda a la centralización, algo que, a su juicio, "no tiene sentido", además de que insiste en que "no hay motivos que justifiquen el traslado".

La portavoz de la plataforma critica que el departamento de Salud haya creado un problema que "no existía" cuando ya tiene resuelta la apertura del hospital de día y ya está prevista la puesta en marcha del de agudos.

En la sesión han intervenido también Eduardo Martínez, psiquiatra del Sector II y Clara, familiar de un paciente salud mental.

Martínez, quien ha centrado su intervención en aspecto técnicos, ha subrayado que la propuesta de centralización no ha partido de los profesionales del hospital Miguel Servet y ha advertido que el planteamiento de que los expertos puedan acudir un día por semana a los Centros de Salud para atender a los pacientes que no puedan trasladarse o con necesidades especiales es "inviable".

Para Eduardo Martínez, la unificación no aporta ningún beneficio terapéutico o asistencial para los pacientes ni para sus familias, alejándose de los principios de accesibilidad, equidad, eficiencia y continuidad asistencial.

Por eso pide congelar los planes de "unificación" e iniciar conversaciones entre todas las partes implicadas y definir e implementar un plan de salud mental autonómico y consensuado, que prevenga y evite la toma de decisiones improvisadas como la actual.

Martínez lamenta tener que comparecer ante la Comisión para "volver a defender planes y estrategias en Salud Mental Comunitaria que ya fueron aceptadas y puestas en práctica desde hace más de treinta años".

Por su parte, Clara, familiar de un enfermo mental desde hace veinticinco años, se ha preguntado que "si tal y como dicen los psiquiatras, es tan importante la rutina y la estabilidad para una evolución favorable en este tipo de enfermedades, ¿por qué pretenden aplicar medidas que lo primero que provocan es desestabilizar?".

Además de que "si tal y como dicen organismos internacionales, legislación nacional, y comités de expertos es tan importante la descentralización, ¿por qué centralizar ahora?".