Las obras del entorno de San Juan de los Panetes siguen avanzando, de modo que se ha concluido ya el 90% del solado. Además, ayer mismo se abrió al tráfico rodado la calle Salduba, de modo que se mejoran los accesos al Casco Histórico antes de que comiencen los días grandes de la Semana Santa.
Los trabajos, ejecutados por Los Tranvías de Zaragoza, tienen como objetivo la recuperación del conjunto histórico de las Murallas y San Juan de los Panetes, es decir, un total de 4.188 metros cuadrados. Cuando finalicen las obras, la superficie peatonal resultante será de 3.220 metros cuadrados, con un solado sin desniveles.
El avance de las obras tuvo como resultado que ayer mismo la calle Salduba se abriese al tráfico rodado. La apertura de este vial, señalaron desde Los Tranvías, es un paso más en unas obras que han llegado a emplear un turno de 20 trabajadores y que continuarán en el entorno de la plaza situada frente a la iglesia de San Juan de los Panetes. El trabajo de solado está al 90% y ya se ha colocado alrededor de la mitad de la piedra de La Puebla de Albortón que recubre el graderío para acceder al templo y servirá como lugar para sentarse.
Esta escalinata ha sido el objeto de algunas quejas ciudadanas y, de hecho, se ha llevado al Justicia de Aragón el posible incumplimiento de la normativa sobre barreras arquitectónicas "Una vez más la vigilancia que hace la Administración acerca de la barreras arquitectónicas queda en evidencia. Y lo peor es que el diseño de las escaleras tampoco cumple la norma autonómica y la propia ordenanza. ¿Cómo piensan que podrán subir las personas con movilidad reducida?", denuncia el ciudadano que ha recurrido al Justicia.
Los Tranvías aseguró a este diario que la obra ha sido aprobada tanto por Urbanismo como por Patrimonio y que el graderío cumple con la ordenanza de espacios públicos. De hecho detallaron, la anterior no lo cumplía con esta legislación porque los cantos de los peldaños de la escalera estaban redondeados, es decir, que era "más fácil" sufrir caídas en el acceso a la iglesia.
La sociedad gestora también recordó que el proyecto se ha realizado tras mantener reuniones con la fundación de Disminuidos Físicos de Aragón (DFA), que avaló la "corrección" del proyecto. Sí reconocieron desde Los Tranvías que DFA reclamó que se facilite un acceso alternativo para personas con movilidad reducida en una fase posterior, tras un replanteamiento urbanístico de la zona.
