En plena segunda ola del coronavirus, con una vuelta a la normalidad en el mes de septiembre más extraño de la historia y ante un futuro incierto, dos jóvenes estudiantes del 4º curso de Turismo de la Universidad de Zaragoza se han marcado el objetivo de hacer de la localidad de Gelsa un atractivo autonómico y nacional. «Pretendemos situar a Gelsa en el mapa turístico», aseguran.

Ellos son JiaYue Yuan y Félix García. El primero de ellos nació en China pero lleva desde los 11 años viviendo en España, mientras que García es natural del municipio de Épila. Ambos son compañeros de carrera y, a través del proyecto Erasmus Rural del campus en colaboración con la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ), se han lanzado a la aventura de elaborar un plan de dinamización turística integral en Gelsa.

No es un Erasmus al uso, ese que te lleva a viajar a algún país de Europa, sino que su ‘aventura’ universitaria pasa por hacer prácticas en el pueblo. Quizás parezca más simple, pero es igual o más enriquecedor. Vivirán en la localidad, al menos, hasta diciembre y durante todo este tiempo analizarán los recursos turísticos del entorno, realizarán un inventario y clasificarán todos los lugares con el fin de elaborar un mapa de dinamización turística integral de la zona. «También queremos luchar contra la despoblación e incentivar a los jóvenes para que vengan a vivir o a trabajar a los pueblos, mostrarles que son una buena alternativa para vivir y donde se pueden ofrecer oportunidades laborales», explican.

En el caso de García ya sabe lo que es vivir en un pueblo, ya que hasta que terminó Bachillerato estuvo en Épila. Para JiaYue es algo novedoso, ya que solamente ha residido en Zaragoza desde que llegó a España. «Nos han acogido muy bien tanto los vecinos como la alcaldesa Isabel, que ha sido la gran impulsora de este proyecto», explican. Ya han visitado numerosas localizaciones de Gelsa que podrían ser turísticas. Esta misma semana, por ejemplo, estuvieron con algunos vecinos en un antiguo aljibe y un mas que ahora sirve como lugar de reuniones familiares en meriendas o almuerzos.

Carencia de recursos

«Es necesario que estos pueblos tengan unas mínimas infraestructuras de comunicación y disponer de diversos servicios para la vida diaria de los habitantes de la zona como colegios o consultorio médicos», explican estos estudiantes. «El turismo sería una buena forma de atracción y de oportunidades en una zona de por sí muy envejecida», dicen.

Estos jóvenes también apuntan al «papel fundamental» de las Administraciones Públicas y del acompañamiento de las iniciativas privadas para revitalizar estas zonas donde dicen sentirse «muy tranquilos» en plena pandemia. «Aquí, además de la calidad de vida, se pueden guardar muy bien las distancias y se puede salir a hacer deporte o caminar tranquilamente sin la inquietud o el miedo por contagiar o que te contagien», señalan.

JiaYue Yuan y Félix García disponen de alojamiento, subvencionados a través del proyecto Erasmus Rural, y también una ayuda de alrededor de 300 euros al mes. Una vez que terminen con su iniciativa no tienen muy claro hacia donde encaminarán su futuro. «Por ahora quiero experimentar un poco de todo y a ver qué es lo que me gusta. El grado de Turismo nos permite hacer practicas desde 1º de carrera y eso me ha llevado a trabajar en diferentes puestos», dice García. «A mi me pasa como a él. Sí que me gustaría ir algún día a trabajar a China, porque hablo los dos idiomas, para adquirir experiencia laboral y ver si hay alguna oportunidad laboral», explica JiaYue.

Eso sí, también la localidad de Gelsa podría estar entre sus destinos: «No descartamos esa opción, pero de momento solo nos queremos enfocar al máximo en el proyecto, y el futuro ya se verá», indican