Tras el proceso de primarias del que salió elegido Nacho Escartín como secretario general de Podemos y por el que se estableció la nueva composición del consejo ciudadano autonómico, el partido abordó ayer por la tarde su futura estructura organizativa.

Entre las primeras decisiones llamó la atención la ausencia de las diputadas Erika Sanz e Itxaso Cabrera del recién creado «consejo coordinador» tras haber sido las cabezas visibles de la candidatura rival de Escartín, que prometió la integración de equipos. «Han recibido una propuesta que no han aceptado, pero la puerta queda abierta y posiblemente acabarán teniendo responsabilidades potentes y claras», explicó el actual responsable del partido.

El consejo coordinador está compuesto por once secretarías -siete mujeres y cuatro hombres- encargadas de organizar «las diferentes áreas de trabajo, cohesionar los equipos y abordar las decisiones inmediatas del partido». El organismo está dividido a su vez en tres grandes áreas.

Del análisis político, las relaciones con la sociedad y la comunicación se encargarán Cristina Pemán, Violeta Barba y Blanca Grimal. De la acción institucional se harán cargo Marta de Santos, Iván Andrés, Marta Prades y Alfonso Alegre. Y por último, las cuestiones de organización y participación interna estarán a cargo de María José Calderón, Carlos Arroyos, Andoni Corrales y Yolanda Sancho.