La falta de urólogos en Aragón ha obligado a suspender las operaciones de vasectomías en el hospital Provincial de Zaragoza, centro de referencia para este tipo de intervenciones tanto en la capital como en la provincia. Hay pacientes que acumulan una demora de más de dos años para someterse a una vasectomía y critican que «nadie» les haya avisado de esta situación.

Fuentes del Departamento de Sanidad reconocen que la «escasez» de urólogos ha provocado que «los quirófanos se prioricen» y que estos especialistas se dediquen «preferentemente» al tratamiento de las patologías. Asimismo, desde la consejería garantizan que las operaciones no han sido suspendidas como tal, sino que a los pacientes que se encuentren en lista de espera se les irá llamando «conforme haya disponibilidad de personal».

Sin embargo, algunos de los afectados han asegurado a este diario que llevan hasta 25 meses de espera y aunque son «conscientes» de que se trata de operaciones «no tan prioritarias» sí reclaman a Sanidad «una llamada». Aseguran que han sido ellos mismos quienes, llamando a Atención al Paciente o preguntando en el Provincial, han obtenido «respuesta» a su situación.

Según los datos publicados por el Ministerio de Sanidad y revisados en enero de este año, en Aragón la plantilla debería ser de 70 urólogos. El problema se agrava cuando hay alguna vacante por bajas, ya que estas no se pueden cubrir.

PROBLEMAS DE PLANTILLAS

Así, la falta de médicos especialistas ya no solo es un problema del medio rural aragonés, sino que la administración sanitaria lo percibe ya en la capital. En Huesca, por su parte, sí se realizan intervenciones de vasectomías, aunque también hay lista de espera.

En el caso de la provincia de Teruel, este tipo de operaciones llegaron a tener retrasos de hasta tres años debido a que la mitad de plantilla de urólogos del hospital Obispo Polanco estaba sin cubrir. Derivar a otros centros de la comunidad a los pacientes zaragozanos es inviable porque se requiere el empadronamiento en la localidad donde se va a realizar la intervención.

Esta situación de demoras y esperas lleva a que muchos pacientes opten por la sanidad privada para realizarse las vasectomías, lo que les conlleva un gasto con el que no contaban. El proceso más barato ronda los 400 euros.

EFECTIVIDAD ANTICONCEPTIVA

La intervención, que está incluida en la cartera de servicios del Salud al igual que la ligadura de trompas de falopio, dura de 15 a 20 minutos y consiste en realizar una incisión en el escroto (piel que recubre los testículos) de uno o dos centímetros.

Se reconocen los conductos deferentes, luego se ligan, cortan y separan los cabos, cerrando con un punto de sutura la incisión de piel. Todo ello con anestesia local, sin dolor y sin ingreso en clínica. Los últimos datos publicados a nivel nacional indican que el 18% de los hombres se realiza una vasectomía antes de los 45 años, pero un 15% se arrepiente y acude a revertir la operación de nuevo. Se estima que la efectividad anticonceptiva es de entre un 99% y un 99,5%.